Esa pregunta me hice yo cuando me llegó la invitación y es que en ella decían que nos invitaban a la Maison Eduardo Sanchez a cortarnos el pelo o peinarnos mientras veíamos el partido de la pista central.
Yo que era la primera vez que iba a pisar la Caja Mágica estaba feliz, y más cuando me enteré de que a la hora que iba, jugaba justo mi adorado Rafa Nadal.
Pero lo primero era lo primero, cortar y peinar el pelo. Algo que no me quería perder, sobre todo después de oír las maravillas que cuenta sobre Eduardo Sanchez y su equipo.
Así que allí estaba, en una peluquería efímera que como la carroza de la cenicienta iba a desaparecer en cuanto se acabara el open de tenis, exactamente en once días.
Una peluquería preciosa, llena de detalles y con unas vistas expectaculares.
Después del lavado y acondicionado del cabello con productos de Leonor Greyl (maravillosos) me puse en manos de Omar, que examinó mi corte y mi cabello y al que solo dije: ¨Haz lo que quieras¨. Y eso hizo.
Una hora y pico después y con el corte del pelo más trabajado que me han hecho en mi vida (de pie, de lado, de perfil) estrenaba mi nuevo Bob.
Que por cierto, no me puede gustar más.
Me habló también de unas mechas que realizan en la peluquería y que voy a ir a probar esta semana. Ya os contaré y por descontado os enseñaré.
Después unos cuantos canapés, las fotos de rigor, un paseo y una comida por la caja mágica con Marisa del El Bazar de Marisse e Inma de Beauty Victim y a seguir la tarde luciendo nuevo corte de pelo.
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure