Por su colorido, su gran tamaño, su gregarísmo, la espectacularidad de sus bandadas en uve y el característico reclamo, “kruuu…kruuu”, la grulla es es sin duda una especie muy popular.
Todos los años llegan a la Península desde el norte de Europa miles de grullas para pasar el invierno. Los primeros bandos cruzan los Pirineos en octubre. Luego hacen una parada en el Embalse de la Sotonera, en Huesca, o en la laguna de Gallocanta, entre Zaragoza y Teruel y de aquí se dispersan a sus cuarteles de invierno.
Los principales lugares de invernada se encuentran en las dehesas de Extremadura, Toledo y Ciudad Real, y en menor número llegan a otras localidades de Andalucía y ambas mesetas.
Durante el invierno se suelen mantener los grupos familiares, por lo que no es raro ver a los adultos con los jóvenes del año. Mantienen la cohesión familiar hasta la primavera, cuando regresan de nuevo al norte de Europa.
Durante el día recorren en grupo las dehesas en busca de alimento y a última hora de la tarde levantan el vuelo para acudir a los dormideros. Estos se encuentran en embalses y humedales de diverso tipo y pueden concentrar miles de individuos creando un espectáculo de gran belleza.
El dormidero más importante está en la laguna de Gallocanta, en donde suelen concentrarse más de 23.000 grullas, seguido de Navalvillar de Pela (Badajoz) con más de 11.000, y el embalse de Rosarito (Avila-Toledo), a los pies de la Sierra de Gredos, con unas 7.000.
¿Te gustaría ver grullas?
Ver los grandes bandos de grullas gritando kruu…kruu es un espectáculo inolvidable para grandes y pequeños. Si no tienes ni idea de cómo, te proponemos varias soluciones.
Visitas guiadas en Gallocanta. Las organiza el centro de visitantes de la reserva y tienen lugar los sábados y domingos de octubre hasta el nueve de diciembre (2013). Hay dos turnos, a las 11.00 y las 15.30, y duran 3 horas. Son gratuitas y requieren inscripción previa en el 976 405 041 ó [email protected]. Cada uno va en su coche, siguiendo el de los guías, que hacen paradas en lugares estratégicos. Aunque llevan material óptico es recomendable que cada uno lleve unos prismáticos.
Festival de las grullas de Gallocanta. Tiene lugar dos veces al año, a primeros de octubre, para dar la bienvenida a las grullas, y primeros de febrero, para decirlas adiós. En estos festivales se organizan rutas guiadas similares a las anteriores, exposiciones, conciertos, anillamiento de aves y otras actividades para mayores y pequeños.
Festival de las grullas de Extremadura. Se organiza en Navalvillar de Pela (Badajoz) a primeros de diciembre (en 2013 será del 30 de noviembre al 1 de diciembre). Como es en mitad del invierno hay miles de grullas. Las actividades son similares a las del festival de Gallocanta.
Otros lugares Qnatur donde ver grullas
En las dehesas del Parque Nacional de Cabañeros invernan varios miles de grullas y no es difícil verlas. Si nos queremos asegurar la observación, tendremos que acudir al atardecer al embalse de Torre de Abraham, en donde tienen el dormidero. También invernan en las dehesas y cultivos del Parque Nacional de Monfragüe y alrededores.
En las lagunas de Villafáfila y en Doñana también invernan varios cientos de ejemplares.
Equipamiento para ver grullas
Como es una actividad invernal es indispensable llevar ropa de abrigo y para disfrutar aun más es deseable llevar prismáticos. Pero si no tienes también disfrutarás, pues son aves grandes, llamativas y que van en grandes grupos. En las excursiones que se han propuesto más arriba los guías llevan catalejos y prismáticos para compartir con el grupo.
También te puede interesar ...
- Ver cetáceos en los parques naturales de España
- Como atraer aves a mi jardín
- Villafáfila … un paraiso para la invernada de patos y gansos