A pocos kilómetros de Malmö, Suecia se encuentra esta bonita casa, perfecta para un verano nórdico en familia junto a la playa.
Lo que más me gusta de los veranos nórdicos son sus eternos días, el sol se pone muy tarde, cuanto más al norte más tarde y las noches frescas, porque eso de dormir con funda todo el año y especialmente en verano, no está pagado.
Lo que menos me gusta es que la lluvia y el fresquete están presentes más a menudo de lo que a la mayoría le gustaría, pero cuando sale un día bueno, se disfruta y se aprovecha hasta el último segundo.
Por eso no es raro ver que los nórdicos cuidan bien sus terrazas y balcones, les gusta estar equipados para cuando el sol hace acto de presencia y hay que mover la vida al exterior. Invierten en mobiliario y decoración de exterior de la misma forma o más incluso, que en otros países calurosos y cuidan hasta el más mínimo detalle, para que los ambientes resulten acogedores y agradables, vamos, para que apetezca estar fuera todo el día.
Esta casa lo tiene todo, tanto el interior como el exterior son ideales para pasar unas vacaciones… o algo más, disfrutad :) ¡Feliz martes!
Vía: Fastighetsbyran