Buenos y gloriciosos días mis queridos fashionistas!
Como llevamos dos seguidos de fiesta, hoy, os quiero presentar un oriental.
Ella tenía bastante claro la estructura, quería una falda con abertura lateral y bikini a juego, partiendo de esta base, nos liamos la manta a la cabeza para decorar y darle un twist.
Para este modelo, necesitaba una tela muy concreta y sabía perfectamente cuál iba a ser, una que encontré en otra incursión y que se quedó a la espera, además de tener un colorido fantástico, brilla, es elástica, gordita y con una fuerza tremenda para aguantar todos los cristales y abalorios varios que llevaría, licra en maravilloso verde. Esta tela, además de todo lo anterior, se trabaja estupendamente, no resbala, no hay necesidad de cerrar bajos o bordes, no se deshilacha y no hace falta remallar y encima tenía dos caras magníficas para trabajar, brillo y mate.
Todas las telas tienen un derecho y un revés, a veces es díficil ver, y hay que seguir el hilo para descubrirlo, a veces tienen doble cara, como la seda natural y a veces tienes la inmensa suerte de poder trabajar las dos caras. Hay telas que dan mas juego del revés, como el crepe y hay veces que uno utiliza el lado que mejor le convenga, como las Señoras que huyen de los brillos, se utiliza la parte mate y queda el brillo por dentro, suave y elegante.
Cuando le presenté la tela, yo iba por el brillo, ella, mas tímida, por el mate, así que finalmente, optamos por combinar las dos, brillante para la falda, mate para el lateral, brillo y mate alterno para el bikini. Era tan verde y tan brillante que pedía a gritos algo que lo decorara y lo suavizara, así que encontré un encaje precioso con dorados y quedó como una sobrefalda y formando la falsa cola. La cola es traicionera, hay que saber andar con ella, para girar, entre otras cosas, hay que andar como en un círculo pequeño hasta darte la vuelta, pesa y especialmente para bailar, tienes que ser un fenómeno para no darte de bruces, pero hay opciones, siempre las hay, y es lo que yo llamo falsa cola, y es colocar entre dos costuras un triángulo al bies y al cortar el bajo, tener cuidado que quede unos 2cm mas abajo suavizando la curva, de esta forma, hay cola, pero no hay peligro de caídas o de que te la pisen, decora sin molestar…divino!
Encontró ella unos cristales preciosos y gorditos para la decoración, así que una vez hecha la estructura, sólo quedaba coser una a una todas las bolitas…manos a la obra!
Hubo actuación, que lamentablemente, no pude ir, y me dió mucha pena porque también bailó mi Shabby en morado y azul…eso sí, me mandaron unas fotos preciosas y la promesa de avisarme para el siguiente.
Espectacular!
Larga y feliz vida, mis queridos fashionistas!