«Sophie Duguet no entiende qué le sucede: pierde objetos, olvida situaciones, es detenida en un supermercado por pequeños robos que no recuerda haber cometido. Y los cadáveres comienzan a acumularse a su alrededor» (de la contraportada).
No se puede decir mucho más de la trama sin destripar el libro. El arranque es magistral, pero a partir de la página 150 se ralentiza un poco. Más vale que a partir de la 200 vuelve a coger ritmo. Un buen thriller "psicológico"