Cada vez me gustan más los vestidos largos y de corte medio que los cortos por encima de la rodilla, no se si será porque me estoy haciendo mayor o porque estoy descubriendo un corte que antes desconocía y al que le tenía horrores.
Hoy os muestro un look working girl, de los que suelo llevar a la oficina para ir un poco más formal pero cómoda a la vez. Es un vestido recto de corte midi color azul marino con estampado de flores en un color rosa muy suave. Decidí combinarlo con mi bolso rosa chicle y unos zapatos rosados de tacón bloque.
El toque rosa de los accesorios como las gafas de sol, los pendientes, el bolso y los zapatos le da un toque muy femenino.