©Deu i Deu /homify.es
Tod@s antes de tener nuestra propia casa hemos soñado con tener un vestidor, sobre todo cuando se ha compartido siempre habitación, solemos requerir determinados requisitos a nuestra
futura casa y vemos estos espacios como algo inalcanzable y quizás podemos decir que no lo es tanto. ¿Y si os digo que no
es tan difícil tener un vestidor donde tener todo en orden?
©Vintage Hunter by Daniel GC /homify.es
Si dispones de una pared libre aprovechando bien el espacio
se puede conseguir un vestidor perfecto, jugando con baldas
de obra o de madera y una barra de metal, podrás tener tus
complementos y ropa bien a mano, cajas, joyeros y pequeños
colgadores son los aliados ideales que harán de tu rincón
guardarropa sea de ensueño. No puede faltar un buen
espejo, con la sencillez del blanco y lo integrado de las baldas,
nos podemos permitir que sea una pieza especial y llamativa.
©URBANA 15/homify.es
Siguiendo con la utilización del espacio, vamos a ver otra opción digamos más seria ideal para los que no les gusta tener todo a
la vista, si tienes una zona muerta o un pasillo ancho ésta es una alternativa genial, en los laterales se distribuyen armarios que hacen las veces de pared para desembocar en una cómoda de madera con un halo clásico que contrasta con el minimalismo que la envuelve, sin duda el centro de atención es el mueble de madera y para ello la utilización de la iluminación ha sido crucial.
© Casa A de 08023 Architects/homify.es
Pero si no somos ni tan minimalistas ni tan clásicos, podemos igualmente desarrollar la misma idea, sirviéndonos de ese pasillo-ropero con un aire más fresco, esta vez el punto de atención es la ventana de cuerpo entero, la claridad que entra y el mobiliario en color blanco, hace que el espacio aun siendo estrecho, parezca amplio, la nota de color la ponen las dos alfombras multicolores. Si queréis muchas más ideas parecidas podéis
ver más vestidores aquí
©Tim Diekhans Architektur /homify.es
¿Y si tenemos una habitación que es un desastre? La típica estancia desaprovechada, la que se utiliza de trastero o habitación de invitados a la que nunca viene nadie, en ella podríamos crear el vestidor de nuestros sueños forrándola con los compartimentos adecuados, no necesariamente ha de ser grande, con una
buena iluminación, un color claro y algún espejo de cuerpo entero, se conseguirá un vestidor magnifico y práctico.
©Bronx/homify.es
Siguiendo en la misma linea y queremos transformar una habitación en vestidor pero de un modo más personal, los armarios y módulos
son los que juegan un papel muy importante, cristales transparentes
muestran interiores impecables y puertas con espejos agrandan
el espacio, las baldas con cajas, nos dan más almacenaje extra. Si nos apetece tener un vestidor personal la decoración se
vuelve ecléctica, con una lámpara de araña, una banqueta
con capitoné y el mobiliario en blanco, se crea un vestidor muy femenino.
©Elfa Deutschland GmbH /homify.es
Si nos gustan los vestidores sencillos o simplemente nuestra
estancia es pequeña y no nos permite muebles voluminosos lo
que necesitamos son módulos livianos e ideas ingeniosas, como
este tipo de vestidor compuesto de guías agujereadas para poder
adaptar todo tipo de accesorios dependiendo de las necesidades,
desde zapateros, corbateros, baldas o barras con este modelo
de vestidor aprovecharemos al máximo el espacio
y la comodidad esta asegurada.
©Studio-dlf / ©R&N relacher&non-sens/homify.es
Las burras son otra idea sensacional a la hora de tener la ropa
a la vista y empezar poco a poco a tener un vestidor, existen
muchísimas posibilidades en el mercado, desde metálicas o
de madera son las opciones más comunes, pero ahora el
cobre comienza a entrar con fuerza, con tubos y
codos se pueden construir burras de formas muy
interesantes y de alto nivel decorativo.
Aquí os dejo un pequeño resumen para poder obtener un
vestidor divino de una manera fácil y con ideas sencillas ...