Rescato
esta, de entre las noticias de la semana:"En UK, los pacientes solo
podrán ser atendidos por personas del mismo sexo biológico". (Twitter)
Aunque otros medios prefieren decirlo
bajo otros titulares:
"Veto del Reino Unido a los
transexuales: impulsará una ley para que sean "tratados de forma
diferente." (La Razón)El Gobierno británico ha sido
acusado de "tránsfobo" después de que quiera impedir a los
delincuentes cambiar de sexo o que las mujeres trans sean tratadas "igual
que las cisgéneros"
Polémica en Reino Unido después de que el Gobierno anunciara su intención de impulsar una nueva ley con la que quiere "impedir a los delincuentes realizarse un cambio de sexo registral". Un gesto que ha sido calificado por muchos como "tránsfobo".
“Reino Unido prohibirá a las mujeres transexuales ser atendidas en unidades hospitalarias femeninas”. (El Español)"Reino Unido veta a las mujeres trans de las salas para mujeres de los hospitales y prohibirá el cambio de sexo para los presos”(ABC)
No quiero entrar a polemizar sobre si esto me parece bien o mal, en tanto en cuanto respeto las libertades de todos y la noticia no me afecta en absoluto, pero me recuerda una anécdota de mi vida:
Fue en el contexto de una visita, hace ahora muchos años, a un familiar ingresado en el hospital Gregorio Marañón. Abrí la puerta de la que me parecía ser su habitación, y dije:
-. ¡Uy!, ¡Perdón, me he equivocado!Volviendo a cerrar la puerta inmediatamente. Aunque luego me puse a pensar en lo que había visto: era una habitación con dos camas, en la que se encontraban dos sujetos semisentados en sus respectivas camas y arropados hasta la cintura. En la primera se encontraba un señor, con ese típico pijama hospitalario de color azul claro. En la otra una señora, con un vestido de tul rojo, repeinada y maquillada…
Me dije:-. ¡Caray, qué problema tienen en este hospital, que alojan juntas a personas de distinto sexo!…
Aunque después, pensando un poco más en el asunto y volviendo a analizar la imagen que había visto, entendí que, por sus rasgos y su aspecto, se trataba de una mujer trans.
Ya veremos como acaban organizando los repartos de habitaciones en el Reino Unido: no les resultará fácil acertar.