Como muchos sabreis, el pasado fin de semana nos fuimos a Roma por cuatro días toda la familia, incluidos la Bichito y el Ricitos (para quien no lo conozcais es el primo de la bichito).
Cuando decidimos el viaje desde el primer momento pensamos en llevarnos a los peques, luego conforme iban pasando los días me lo empezé a pensar, y finalmente decidimos que vinieran, total iban a ser 4 dias.
Desde el minuto uno fuimos contádoles a los peques donde íbamos a ir, que iban a ver, y donde iban a montar..........EN AVION GRANDE.........la Bichito no paraba de decirlo constantemente, hasta le dijo a su profe que iba a ir en avión grande a Polvoranca, que es un parque que hay en Lagoness, jajaja.
En el avión comenzaron las emociones, mira primo las nubes, mira prima la alas, el cielo......se lo pasaron pipa. Cuando llegamos al apartamento les encantó, porque era muy grande y lo bautizaron LA CASA GRANDE......se la recorrian de un lado al otro y no paraban.
Hay que decir que se portaron como unos campeones, obedecieron, comieron bien, durmieron genial........unos santos. Tambien hay que decir que hacía mucho calor y yo creo que de lo mismo se durmieron en muchos ratos.
El caso es que viajar con niños tampoco está tan mal, hay que adpartar y saber dejar momentos para ellos. Aunque la Bichito y el Ricitos son muy pequeños aún, hay muchas cosas que ver en roma y que se pueden adaptar a ellos.
Concretamente en el Vaticano hay ciertas salas que resultan mas divertidas como la sala de los animales, la de las momias o la dedicada a Egipto.
En el norte de Roma existe la Villa Borguese, donde se encuentran las Galerias Borguese, pero además es uno de los pulmones de la ciudad, un gran parque con botes a pedales, columpios, paseos en poni, un trenecito y mucho cesped para disfrutar de un rato con ellos.
Pero quizás su momento fue descubrir que en Roma también hay parques, en concreto encontramos este tan chulo en el Trastevere, que mientras la abu, la tia y mamá hacia compritas, los papas y abu se quedaron con los peques y pudieron disfrutar de un rato de parque.
Otra opción es difrutar de sus grandes plazas, en la Piazza del Popolo nos encontramos con muchos artistas callejeros, en concreto con uno que hacia pompas de jabón gigantes y que hizo las delicias de nustros peques.
También deciros que como es e país de los Helados, no hay nada que no funcione cuando en un frase incluyes la palabra Helado.