Revista América Latina

Viaje a dedo a Mendoza parte 1

Por Viajeenrenoleta

Viaje a dedo a Mendoza parte 1

   Hace casi dos años que no me tomaba vacaciones. Es mas, luego de mi épico viaje por Latinoamérica he salido muy poco de la ciudad. Fue un periodo mas hacia adentro que hacia afuera. Pero eso ya quedó atrás. Lo importante fue que apareció el hueco, tenía la plata y las ganas de salir a la ruta eran sobradas.
   El razonamiento fue el siguiente. Tengo muchas ganas de salir de vacaciones. Tengo unos mangos. ¿Me voy 5 días y viajo en colectivo o viajo 15 días? Obviamente todos quisieramos 15. Entonces elegí esa opción pero la estrategia fue... "no gasto $1  en colectivo".
   Armé el equipaje mínimo indispensable. Mochila de 35 lts (la misma que uso para andar durante el día). Tres calzonsillos, un pantalón largo, uno corto, 4 remeras, 1 buzo. Eso me ocupó la mitad del espacio. La otra mitad  me compré un termo de 1/2 lt, un pequeño equipo de mate, algunos saquitos de té, 1 lata de paté, 1 de atún, 1 de duraznos en conserva, alguna galletita, 2 manzanas, 1 naranja y algunas cosas mas. Con eso se completó la mochila. Por afuera le amarré la tan viajada y calentita bolsa de dormir. El paso siguiente fue salir a la ruta.
   Me desperté a las 5 am y me tomé el 57 a Luján. Caminé a la rotonda donde la ruta 7 se inicia (o cambia de autopista a ruta). A las 8 am ya estaba haciendo dedo. Le levanto el gordo a todos. No bajo el brazo hasta que alguno me lleve. Esperé 40 mín y me levantó un vehículo nuevo. El conductor trabajaba en el Ministerio de Defensa de la Nación y entre otras cosas estuvo como casco azul durante la guerra en Croacia. Me llevó hasta Carmen de Areco.
   Esperé 5 min. Me levantó un camión hasta Chacabuco. Ahí me encontré con un policía hasta que pasó un patrullero. Fuí encerrado como delincuente hasta Laboulaye, Cordoba. Ahí esperé 5 min. Me levantó un MB 1525 rojo. El camionero me levantó por que dice, se estaba durmiendo y necesitaba conversación. Yo saqué el mate y cada vez que veía titilar sus ojos le cebaba un verde.
   Para las seis de la tarde ya estaba en Villa Mercedes, San Luis.
   El resto del dedo se los cuento en la parte 2 de mi viaje...


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