Viaje a la Costa Oeste: 4 momentos de película

*nota: los escenarios de las películas que relatamos no siempre coinciden con los lugares que nos evocaron a ellas. Este es un post de sensaciones y recuerdos, que no aspira a informar, en ningún caso. Pero sí a inspirar. Además, todas las películas mencionadas merecen la pena. Y sus lugares de rodaje son elemento esencial en ellas. Así que tampoco está de más que lleguéis al final. ¡Viva el cine y viva los viajes!

Quienes no entendemos la vida sin el séptimo arte, sabemos que un viaje a EE.UU. -más si cabe a su Costa Oeste e incluso más si es cerca de su meca, Los Ángeles- es una incursión en los recuerdos de las películas que vimos. Cada etapa del viaje por tanto como una sucesión de fotogramas. De ahí que no pudiera dejar pasar la oportunidad de contaros aquellos escenarios del viaje a la Costa Oeste que me llevaron las cintas que en algún momento me han hecho vibrar, haciéndome disfrutarlos aún un poco más si cabe. Lugares de película…lugares de emociones ajenas y ficticias pero que con todo, uno siente como propias. 

LA: La La Land

Madrugamos aunque no llegamos al Observatorio Griffith para ver amanecer, como era la idea. El sol aún no ha acabado de levantarse del todo y las nubes cubren Los Ángeles, aún dormida porque es domingo. El momento no es romántico, quizás por el sueño, pero la vista es maravillosa. Pienso en La La Land, pues curiosamente la vi el día anterior en el avión por segunda vez. En sus referencias, de lugares y del séptimo arte. En su idea principal. En la belleza que hay en la vida cuando apostamos todo a lo que nos gusta… y en lo difícil que es también a veces.

Gasolinera de Arizona: Giro al Infierno

Por fin, una gasolinera tras más de 30 kilómetros esperándola. Al llegar, vemos mucho polvo sobre los surtidores; nos hace dudar. Quizás esté cerrada. Pero el neón rojo anuncia que el bar donde debemos pagar está abierto. Así nos adentramos en un establecimiento de carretera, oscuro y variopinto, al más puro estilo de las películas de Tarantino u Oliver Stone. El lugar me atrae de inmediato y creo que no encontraremos algo tan auténtico en mucho tiempo, así que decido dedicarle un tiempo.

Al entrar, hay un anuncio del campo de tiro que hay en el exterior, cientos de souvenirs y unas chicas encantadoras nos lo confirman: podemos llenar nuestro depósito. Todo sale bien, no hay giro al infierno, aunque todo me recuerde a esta película de los 90. No dejamos de hacernos unas fotos en el decorado exterior -con Rambo y Marilyn como protagonistas- antes de irnos y volver a mirar impresionados el lugar. ¡Es completamente de película!

Monument Valley: Thelma y Louise

EE.UU. es un territorio tan basto que los viajes por carretera están presentes en su misma esencia. Se me vienen a la mente grandes libros o películas que lo demuestran. Pero me tengo que quedar con una… y no dudo. Esa es Thelma&Louis, que curiosamente no está rodada en esta zona del país, sino en Utah. Concretamente, en Arches & Canyonlands National Parks. Pero es imposible que el paisaje no te recuerde porque al fin y al cabo están bien cerca. Así que en Monument Valley recordé ese peliculón de hace bastantes años pero de total actualidad.

Este es un ejemplo de películas que me evocaron paisajes que no fueron exactamente los escenarios de rodaje. Porque pocas películas han retratado con la misma delicadeza, elegancia y emoción un viaje en carretera. Claro que habla de muchas otras cosas. Un viaje de vida. Un viaje de libertad…

The Florida Project

Lejos de estar en la situación de las protagonistas de The Florida Projet, el lugar donde más tiempo pasamos durante este viaje fue un motel de carretera, donde por circunstancias penosas de la vida viven las jóvenes de la película. Por eso, durante muchos momentos recordé aquel estilo de vida, tan diferente al nuestro. Vida de «sucio motel de carretera«; frase que también venía a mi cabeza todo el rato. Los moteles donde nos alojamos estaban limpios y lejos de esa imagen que nos ha dejado el cine -casi siempre tan estereotipado-, eran lugares cálidos. Así que en este caso: la realidad mejoró la ficción

Bonus Track: Big Little Lies en Monterrey

Aunque no es una película, hemos incluido en este post a Big Little Lies. Hoy por hoy las series forman parte de la ficción en pleno derecho. En esta ocasión, recorrimos la ciudad de Monterrey y su cercana Carmen By The Sea, que quizás encarna en mayor medida el espíritu de lugar de residencia de mujer de poder adquisitivo alto que ha alcanzado los cuarenta y que aparece en la serie. No se vive mal en este lugar, es evidente; todo es bastante idílico, pero en cada hogar hay una historia, seguramente igual de mísera que en los hogares más pobres. Como en su caso bien nos recuerda Big Little Lies.

En Monterrey presumen con carteles de algunas de las localizaciones. Así encontramos por ejemplo el café donde acostumbran a quedar las protagonistas de la obra, si bien nosotros no paramos. Disfrutamos de la zona. El ambiente marítimo envuelve el lugar y el buen tiempo que hace nos alegra el día. Un buen lugar para vivir, como casi toda la costa californiana. De eso no tenemos duda.