Viaje a las montañas

En el mes de agosto nos fuimos unos días al camping Río Mundo, por albacete, aprovechando las vacaciones del papá del vikingo. Es un camping que esta en plena montaña, cerca del nacimiento del río. Cogimos un bungalow equipado con salón, aseo, dos habitaciones, aire acondicionado...., aunque la mayor parte del día lo pasábamos en una parcela con caravana, que era de mi hermana y mis dos sobrinos (8 años y 6). 



Salimos un Domingo y adivinar que nos pasó el sábado por la tarde-noche..., ¡una gotera en el salón y en la entrada!, sí, sí, el karma y esas cosas.... Nos pensamos el no ir porque la gotera era bastante grande, tenia la tarima llena de agua, me salían chorretes por una caja de registro de luz, y estábamos bastante asustados pero como ya habíamos pagado la mitad y total, al seguro hasta el lunes no podríamos llamar. El vecino corto la llave de agua de su aseo que esta justo arriba a ver si así cesaba. Efectivamente el domingo por la mañana ya estaba todo casi seco y además le pedimos aun familiar cercano que pasará de vez en cuando a mirar como estaba todo. 

Salimos sobre las 10 o 10.30 de la mañana y tardamos alrededor de 2 horas y media, el vikingo se pasó la mitad del viaje durmiendo y la otra mitad jugando con una pelotita, hicimos un descanso corto para estirar las piernas y darle teta y a eso de la 13 o 13:30 llegamos al camping. El vikingo estaba bastante nerviosito y no paraba quieto, supongo que también notó el cambio y que estábamos de vacaciones jijiji. Es un lugar muy bonito, en plena montaña, lleno de arboles, aire fresquito y puro...vamos desconexión total con la vida diaria!!!  El primer día al llegar y comer nos fuimos por supuesto a ver el río y a pasear y ver el paisaje, al vikingo nos lo colocábamos en la boba 4g a la espalda y él estaba la mar de bien ahí mirándolo todo, nos bañamos en el rió que estaba súper congelada, al vikingo solo le moje los piececitos.

 Por la noche si que estaba peor, en una cama de 1,30 los tres apenas cabíamos, mas que tuvo muchísimos despertares pidiendo teta y además como no teníamos la lucecita de noche estábamos a oscuras y él ya se va fijando más en las sombras y en los pequeños detalles, le daba miedo porque miraba alrededor y agitaba las manos y lloraba, enseguida se giraba buscando la teta. Aquí me di cuenta para mi los beneficios del colecho, de esta manera el se podía sentir mucho más seguro teniéndome cerca que no en una cuna el solo pasando miedo el tiempo que tardo yo en levantarme e ir a consolarle. 

Al día siguiente hicimos más excursiones al nacimiento del río y a las pozas de alrededor, me bañe en todas eeeh, que conste!!! Y el vikingo cada vez estaba mejor, mas tranquilo, solo el día siguiente un poco potrosillo, yo creo de no haber dormido bien en la noche pero la segunda noche ya se despertó menos aunque más veces que en casa, y ya la tercera y ultima noche durmió bien con dos despertares solo. También visitamos la piscina del camping, bastante fría pero ahí si que bañe al vikingo aunque ese ni siente ni padece jajaja, tan a gusto que chapoteaba. El tema de la comida súper bien porque me llevé el bumbo que podéis ver en la foto de arriba que tiene también una bandeja de plástico y ahí le poníamos la comida, eso sí tengo que admitir que comimos literalmente y con perdón como unos ¡¡cerdos!!. El campo hace que te entre hambre....jajajajaja Y en general esos fueron nuestros días de vacaciones, yo descanse muchísimo y me recargué las pilas, además de la relajación. Aquí os dejo un par de fotitos muy bonitas que visitamos.

A la vuelta la gotera ya estaba seca y ya nos pusimos en contacto con el seguro y toda la pesca, la verdad es que la vuelta es como una bofetada a la realidad, pero solo el primer día luego ya vas teniendo la vuelta de las rutinas con las pilas recargadas jejeje. El vikingo al llegar genial, paso la vuelta dormido todo el tiempo. Con sus rutinas de siempre, no le trastoco nada a la vuelta de las vacaciones aunque allí si lo hiciera. Y estas han sido nuestras mini vacaciones!!!!