Gran victoria de las empresas de sondeos, que muestran lo avanzada que está la disciplina que con unas cuantas entrevistas perfectamente elegidas, realizadas y analizadas sean capaces de cuadrar resultados electorales, proyectan emociones individuales a futuro. Esperemos que nadie tenga la tentación de sustituir la decisión real de votar por encuestas, a pesar de que cada día más se gobierna atendiéndolas. Salvo en el PSOE, que desoyó todos los avisos desde el primero hasta el último.
Ha sido una victoria trabajada de Rajoy contra parte de sus huestes, generales y golpistas enquistados (El Mundo…), todo lo que se cansó hacia dentro lo descansó hacia fuera, la imagen del indolente al que han servido la victoria en bandeja parece que refleja bastante de verdad. Han ganado los azules pero no sumando muchos más votos que en anteriores contiendas, les ha servido con mantener a su fiel electorado. Lo realmente esencial ha sido que han perdido los socialistas, derrumbados hasta 7 millones de votos, perdiendo 4,3 millones desde las anteriores generales, que pueden haber ido a sumar de más al resto de partidos pequeños 2,6 millones y otro 1,5 millón pasar al PP. La abstención aumentó en 2 puntos, medio millón de personas, hasta un total de 9,7 millones.
La prensa destaca las subidas de IU y de UPyD y Amaiur en Euskadi, por encima de PNV. La subida de IU ha sido bien rentabilizada en escaños, pero parece bastante pobre en votos, hasta un total de 1.700.000 en medio de la pérdida socialista de 3 millones de electores, parece poca renta obtenida desde esos caladeros que muestra un amplio sector de desafectos socialistas que no pasarán nunca a esa zona. UPyD obtiene una buena subida hasta 1.140.000, pero con menor rentabilidad en escaños que la lograda por IU, habrá también votos de anteriores electores socialistas. Los resultados de estas dos formaciones sirven otra vez para demostrar las diferencias de votos/escaños al compararlas con las formaciones nacionalistas que con votos equivalentes o menores, obtienen muchos más escaños.
El sistema electoral español, prima la concentración provincial, lo cual favorece a los nacionalistas, perjudicando a los partidos globales, (nacionales, estatales). Aunque los desequilibrios no provienen tanto del sistema D’hondt, de restos, que evidentemente fomenta mayorías primando a quien más logra, cuanto de la circunscripción electoral provincial y número de diputados asignados a ella.
Suficientes estudios hay sobre la mesa, incluidas recomendaciones del Consejo de Estado para modificar la ley electoral y ajustar más los votos a escaños, al igual que las listas desbloqueadas, (que no abiertas), parece que han entrado en proceso de cambios, porque lo que al PP le quitaría de sobreprima actual lo podría compensar con disminuir la sobreprima que tienen hoy las formaciones nacionalistas, en una legislatura que volverá a aumentar el problema territorial.
De los resultados menores, me parece pequeño el obtenido por Equo, 216.000 más Compromis 125.000 y los votos nulos y blancos 650.000, (200.000 más que en 2008) lo cual indica en ambos casos poca fuerza de las redes sociales y similares, todavía, comparativamente hablando con el conjunto de la sociedad y muestra que nichos muy agitados pueden dar imágenes distorsionadas de la realidad, que es mucho más amplia que dichos ‘hormigueros’.