Saga:Crepúsculo (5/5)Autor:Stephenie MeyerEditorial: Alfaguara/PRH*Gracias a PRHpor el libro*Sinopsis:
Cuando Beaufort Swan se muda a la fría ciudad de Forks y conoce a la misteriosa y atractiva Edythe Cullen, toda su vida dará un giro emocionante a la par que aterrador.
Con su piel de porcelana, sus ojos dorados, su voz hipnótica y sus dones sobrenaturales, Edythe es tan irresistible como enigmática. Lo que Beau no sabe es que, cuanto más cerca está de ella, más peligro corre él y todos los que le rodean. Y tal vez ya sea demasiado tarde para dar marcha atrás...
Antes que nada debo aclararles que en esta reseña no hablaré tanto de las carencias de Meyer como autora porque sino que me concetraré más en hablar de esta revancha suya.
Como ya sabrán Crepúsculo cumplió diez años de ser publicado y a Meyer le propusieron hacer algo especial para celebrarlo y mientras la autora pudo haber terminado por fin “Sol de medianoche” (la historia desde el punto de vista de Edward) o sacar la segunda parte de “La huésped” (recapacita Meyer, RECAPACITA), ella decidió callar a todos aquellos que la criticaron y cambiar el sexo de todos los personajes. Es decir, en este libro Edward es mujer (Edythe), Bella es hombre (Beau) y así todos los personajes con excepción de los padres de Bella/Beau que mantienen su género.
Y si, sé lo que están pensando pues yo misma lo pensé, ¿Qué va a tener esto de bueno? La respuesta queridos lectores es que aunque no es el mejor libro que he leído en mi vida, ni un libro que se me quedará grabado en la memoria por los siglos de los siglos, sin duda es el segundo mejor libro que Meyer ha escrito y en definitiva es mejor que los cuatro libros que componen la historia original.
Sabía con certeza un par de cosas. Una era que Edythe era realmente una vampira. Otra era que una parte de ella, y no sabía lo potente que podía ser esa parte, me percibía como alimento. Pero, en realidad, nada de eso importaba. Lo único que importa era que la amaba, más de lo que hubiera creído posible amar cualquier cosa. Ella era todo lo que deseaba, y lo único que desearía por siempre jamás.
Digo esto porque Meyer ha logrado corregir su historia en algunos puntos haciéndola un poco más coherente. Puede que al principio les resulte muy tedioso pues la primera parte es la misma que Crepúsculo. Solo notaremos un par de cambios aquí y allá pero en general todo el tiempo que Beau y Edythe se toman para conocerse es lo mismo que Bella y Edward pero una vez que esto acaba la historia empieza a tomar distintos toques y al final logro contarnos la misma historia pero a la vez hacerla diferente.
Por ejemplo los Cullen, cada uno de estos miembros de la familia tiene una historia nueva que quizá no está muy lejos de la original pero sin duda disfrute conociendo su nueva historia.
Otro gran punto a favor de este experimento sin duda son Edythe y Beau. Edythe por una parte es menos (mucho menos) estirada y conservadora que Edward y eso hace que la interacción entre los dos personajes sea más ligera y un poco divertida.
Beau… no entiendo porque desde el principio Meyer no pudo hacer un personaje así en lugar de hacernos sufrir con Bella. Beau dista mucho, pero mucho de Bella y hace las cosas millones de meses menos insufribles que Bella.
Quizá había veces en las que Meyer exagero un poquito al querer dejarnos en claro que Beau no es Bella e hizo que soltara algunos comentarios o que reaccionara de forma un tanto machista, pero en general me ha parecido un buen personaje que no es dramático ni emo y que además es muy consiente que lo que siente por Edythe es un tanto enfermizo y raya en el acoso.
Y de ese modo la leona se enamoró del cordero.
-¡Qué cordero tan estúpido!
-¡Qué leona tan morbosa y masoquista!
A sí que en resumen, el experimento (o revancha) de Meyer no resultó tan desastrosa como yo creía y al final me quito el mal sabor de boca de ese final que nos dio en Amanecer. Eso sí, si no han leído los cuatro libros de la historia original les recomiendo encarecidamente que se lean primero este libro.