(Los acentos fueron obviados por
cuestiones tecnicas)
Vidal cambio a ultimo momento: una epidemiologa de UNICEF sera ministra de
Salud.
Zulma Ortiz
fue presentada como la reemplazante de Alejandro Collia al frente de la
cartera sanitaria. Especialista en epidemiologia, es considerada
“independiente” de lo politico, y se suma a ultimo momento al gabinete. La
interna radical complico el nombramiento. Graciela Reybaud, la ministra que
no fue.
Zulma Ortiz es medica reumatologa, tiene un Master en Epidemiologia, Gestion y
Politicas de Salud en la Universidad Nacional de Lanus (UNLa), y Research
Fellowship en Epidemiologia Clinica e Investigacion en Servicios de Salud en la
Universidad de Ottawa, Canada. En los ultimos 10 años, trabajo en varios
programas del Ministerio de Salud nacional y de otras provincias. Es miembro de
la Academica Nacional de Medicina y trabaja en UNICEF Argentina, ademas de
miembro del comite asesor en investigacion para la salud de la Organizacion
Panamericana de la Salud (OPS).
De esta forma, se pone fin a una larga discusion sobre quien manejara la salud
en tiempos del PRO. En una primera etapa, la idea era que el radicalismo pusiera
el ministro. Habia tres candidatos a ocupar el manejo de la salud bonaerense en
su momento: ex diputado provincial Luis Blanco, Marcelo Uriarte y Claudio Perez
Irigoyen, estos dos ultimos de la UCR platense. Ademas, en las ultimas horas se
sumo el diputado provincial Alejandro Armendariz, propuesto por otra linea
interna de la UCR. La pelea se empantano de tal manera que no hubo avances
concretos, y la “rosca” radical se metio en un callejon sin salida.
Ante eso, Vidal decidio romper el acuerdo inicial, y nombrara a alguien por
fuera de la UCR. La primera version indico que la actual titular de Salud
porteña, Graciela Reybaud, ocuparia ese lugar. La idea se potencio luego que el
jefe de Gobierno de la Ciudad Horacio Rodriguez Larreta reemplazo a la
funcionaria, dejandola libre para su desembarco en Provincia. Pero finalmente se
eligio a Ortiz, con perfil independiente y con la dura mision de manejar un
sistema sanitario enorme, con varias deficiencias y una dirigencia gremial
movilizada y combativa.
Todavia no se sabe quien acompañara a Ortiz en su nueva tarea. Se especula que
muchos de los funcionarios que acompañaron estos años a Collia se mantengan en
su lugar, por lo menos en un comienzo. Lo mismo los directores de hospitales y
otros cargos, que suman segun las estimaciones 300 puestos. Por su condicion de
independiente se supone que la flamante ministra no tenga un equipo propio de
movida, y vaya sumando gente de confianza de a poco. En este sentido, no se
descarta que algun radical pueda sumarse a las subsecretarias.
Revista Ciencia
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