Corría el años 2003 cuando la editorial Poliedro, gobernada por Julieta Lionetti, publicaba la primera novela de James Sallis en España. Lionetti nos descubrió a Sallis, que hasta el momento no había sido traducido en este país. Tuvimos la suerte de que Poliedro publicara cinco de las seis novelas de la serie de Lew Griffin, y la mala suerte de que la sexta y última se quedara en el tintero, quizá por falta de tiempo, ya que la editorial cerró sus puertas.
Junto a la serie de Griffin, Poliedro también publicó esta pequeña maravilla de la que os hablo hoy, Vidas difíciles, un librito (138 páginas) con las biografías de tres de los grandes del género negro: Jim Thompson, Davis Goodis y Chester Himes.
Aunque no son más que apuntes, un repaso muy general de sus vidas y alguna anécdota, son sobre todo, estas tres (mini)biografías, un pequeño análisis sobre el carácter narrativo de estos tres grandes escritores, de sus demonios, su metodología, los mitos que los rodean. Una introducción a sus obras, a las buenas y a las malas, porque Sallis habla siempre claro y humaniza a estos tres grandes autores, nos habla del hombre, del escritor, y no del mito.
Es también este libro un pequeño ensayo sobre la literatura Pulp, sobre sus orígenes, sobre como muchos autores, los tres que aquí se presenta por ejemplo, destacaban por encima del resto y cómo sus peculiaridades los hicieron perdurar en la historia de la literatura Pulp, aunque sus inicios y primeros años fueran realmente duros.
Vidas difíciles es una pequeña exquisitez para los amantes del género negro, para los amantes de esa literatura exprés y bajo demanda que siempre ha estado un poco menospreciada. Sallis le da el valor que se merece, nos habla de tres autores que asomaban la cabeza por encima del resto, de tres autores que en su país fueron olvidados largo tiempo mientras en Europa (sobre todo en Francia) eran reeditados y apreciados como auténticos maestros del género.
¨La literatura de consumo masivo en la que tuvo origen la novela negra, provocó auténticos fenómenos, un gran océano de millones y millones de palabras, por encima de cuyos estereotipados argumentos y trilladas escenas se alzaba de vez en cuando la auténtica naturaleza de la sociedad como la cabeza de una serpiente.¨
Dice Sallis de Jim Thompson ¨ …la obra de Jim Thompson constituye un largo asalto a las suposiciones, y son raras las veces en que el autor somete el argumento a las fórmulas que esperan los editores. De hecho, destruye de manera metódica todos los clichés, no trascendiéndolos, como podría hacer un autor más ¨literario¨, sino sumergiéndose en ellos a tanta profundidad, cerrando de tal modo las posibilidades de volver a la superficie, que quedan patas arriba.¨
Esa manera en que Thompson siempre le da la vuelta a sus novelas y hace lo que no esperas, no siempre le sale bien claro, pero hay que sonreír cuando los escritores de thrillers de hoy en día intentan algo similar, Thompson ya lo hacía, y mucho mejor que ellos.
Sobre Goodis: ¨Las mejores obras de Goodis crean una poética única de soledad y miedo (…..) e incluso las menos buenas, las menos brillantes, cobran vida en repentinos trozos de vívido sentimiento.¨ o ¨Para los personajes de Goodis no hay escapatoria, sólo más trampas inevitables, más prisiones mentales.¨
Es cierto que uno al leer a Goodis siente la asfixia de sus personajes, la maldad que los rodea siempre, como si la llevaran adherida al cuerpo, la oscuridad que los aplaca.
Y sobre Himes: ¨ En tanto, nación, o individuo nuestra fortaleza proviene con frecuencia de nuestras debilidades. Por desoladoras que sean, por rotas que estén en el escurreplatos de la historia, las obras de Chester Himes celebran la lucha de un hombre contra la corriente, contra terribles fuerzas superiores –contra su propia vida, su época y su temperamento, contra las autolimitaciones de las propias formas que eligió para expresarse- a fin de rescatar del frenesí cotidiano, como diría Baudelaire, aun cuando nos dé la espalda, una mirada al sufriente rostro de la verdad.¨
Himes sintió siempre el odio de los demás, el rechazo por ser negro, incluso se fue de su país para poder vivir tranquilo y fuera de las miradas acusadoras. Todo eso quedó fielmente reflejado en sus novelas, atenticos delirios con tramas imposibles y muy locas, pero con mucho trasfondo y escritas con maestría. No siempre sus novelas son lógicas, de la manera en que entendemos una novela de género, pero si son, ante todo, reivindicativas.
Vidas difíciles no es una revisión profunda sobre estos tres grandes escritores, para eso existen biografías exclusivas sobre sus vidas, ni un estudio sobre sus obras, ni nada demasiado existencial. Como he dicho al principio, Sallis ha escrito un libro para todos esos aficionados al género negro, al Pulp, a una época donde escribir era sobrevivir y hacer camino, un libro para disfrutar de anécdotas puntuales, de retazos de vidas, de chismorreos, de opiniones. Un libro en apariencia pequeño que encierra mucha sabiduría.
Vidas difíciles
James Sallis
Poliedro 2004
138 páginas.