Oficiales de policía de Rochester, del estado de Nueva York arrestaron a una niña de 9 años, y justificaron su actuación alegando que la niña, cuya identidad no ha sido revelada, sufría una crisis mental y amenazaba con matar a su madre y suicidarse.
Al ser llamados al lugar de los hechos el pasado viernes, los oficiales esposaron a la niña, y como la misma se rehusó a entrar a la patrulla, usaron gas pimienta, como se puede ver en los videos de las cámaras de seguridad que llevan los policías en su uniforme.
Argumentaron que su acción fue para garantizar la seguridad de la niña.
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La alcaldesa de Rochester, la afroestadounidense Lovely Warren, condenó el uso de la fuerza contra los niños y prometió una investigación interna sobre las prácticas de los policías de la ciudad.
“Tengo un niño de 10 años. Es un niño, es un bebé. Como madre, este vídeo no es algo que una quiere ver”, dijo el domingo durante una rueda de prensa.
Este es el segundo incidente del año donde los policías de Rochester están siendo denunciados por actos violentos contra ciudadanos afrodescendientes. En marzo del año pasado murió Daniel Prude luego de haber entrado en coma como resultado de las heridas recibidas tras su detención.
Prude, luego de haberle escupido a los agentes policiales y afirmara que tenía coronavirus, los mismos le pusieron una capucha de tela en la cabeza.
La muerte de Prude, que también sufría una crisis mental en el momento de su arresto, provocó una investigación y manifestaciones multitudinarias.