Videojuegos más cortos sería la solución de la industria para evitar mas retrasos por culpa del COVID-19.
Los videojuegos, como casi todo lo que nos rodea actualmente están siendo damnificados por la enorme pandemia que asola el planeta entero, muchos lanzamientos han sido pospuestos, decenas de títulos no se han lanzado en su debido momento y no dejan de llegar noticias sobre fechas de llegada sin ni siquiera una pista aproximada.
Casos sonados como el de The Last of Us 2 o Iron Man VR, son solo algunos ejemplos de que obviamente la pandemia está haciendo mella en el mundo del entretenimiento electrónico.
Posiblemente el peor de los problemas se lo lleven a hora los juegos que están en desarrollo cuyos estudios no pueden trabajar en equipo en muchos casos de manera coherente para proseguir con sus trabajos, lo que hace que estos títulos o se estanquen o también reduzcan considerablemente su ritmo de trabajo.
Un reciente informe de The New York Times ha considerado que al parecer algunos estudios estarían barajando seriamente la posibilidad de acortar la duración final de muchos de los juegos que están por llegar, todo esto a favor de un menor tiempo de desarrollo de estos y un cumplimiento de las fechas de llegada.
De momento no se mencionan juegos en cuestión, pero si se habla de posibles lanzamientos que tenían prevista su llegada este mismo verano, algo que sin duda no es una buena noticia, pero que parece ser que podría ser una de las opciones que barajan los estudios.
De momento no hay ninguna desarrolladora que se haya pronunciado al respecto, pero quizá si estemos ante una solución temporal, al menos para el futuro inmediato del mundo del entretenimiento, siempre nos quedarán los DLCs para completar aquellas historias escasas en contenido.