Videojuegos ya tienen su propio oscar

La gala de los mejores videojuegos del año se celebra estos días en Bilbao. Es el Fan & Serious Game Festival, que premia a los juegos de ocio y a los formativos más importantes del momento.Los británicos de Rare software, ligados a Microsoft desde 2002, han triunfado con el polideportivo «Kinect Sports 2», flamante vencedor en la categoría social/casual/familiar. Otro título con espíritu olímpico en sus venas es «Top Spin 4», para muchos el mejor simulador tenístico del año, gracias a la espléndida labor de 2K Czech, ganadores del premio en la modalidad deportivo/velocidad.
Y, después de vender cinco millones de ejemplares en la última semana, nadie dudaba que «Battlefield 3», de los suecos DICE, haría zafarrancho en la categoría de mejor juego de acción. Igual que el trofeo más terrorífico se lo llevó de calle la avalancha turística zombi de «Dead Island», de los polacos Techland, quienes lograron doblete con el divertido «The next big thing. Hollywood monster 2», elegido mejor juego de aventura. Para «Crysis 2» de los germanos Crytek, fue el galardón de mejor banda sonora, mientras que el fantástico «Uncharted 3», de los californianos Naughty Dog, ganó el trofeo al mejor juego no europeo. Por su parte, «Gears of War 3», ojito derecho de Microsoft, recibió el reconocimiento a una saga que ha marcado un antes y un después en la Xbox 360.
En cuanto a los «Serious Games», el mejor juego de salud fue para «Playmancer», título de estrategia aventurera aplicado por el hospital de Bellvitge para enfermos con trastornos compulsivos; el microscopio virtual para las portátiles de Nintendo «AfterZoom», de Abylight, se llevó el galardón al mejor título educativo; «Siqur», sobre seguridad en el trabajo en plantas industriales, se alzó como el mejor juego de simulación; y el histórico «Medieval Dublin» fue considerado mejor juego de cultura.