Ver a Jorge Dalto tocando el piano como lo hace en este clip requiere de muy pocas explicaciones. Tan sólo necesitas algo de sensibilidad musical para apreciar la grandeza de este extraordinario artista fallecido tras una larga y penosa enfermedad hace ya 23 años. Jorge había cumplido tan sólo 39 años cuando el cáncer acabó con su meteórica carrera pero ya había dispuesto de tiempo suficiente para dejarnos un legado musical absolutamente imprescindible que le convierte en uno de los padres indiscutibles del latin jazz y del fusion de los años 70s. Os recomendamos todas y cada una de sus grabaciones en solitario desde "Chevere" hasta "New York Nightline", grabada junto a Superfriends, banda que incluía a algunos de sus amigos, como George Benson, David Sanborn, Anthony Jackson o Patato Valdés, y editada tras la desaparición del pianista, pero también algunas de sus impresionantes colaboraciones con Paquito D'Rivera (memorable El Día Que Me Quieras, un emotivo dúo con el saxofonista), con Patato Valdés en el imprescindible "Masterpiece" o con George Benson en su multipremiado Breezin' (1976), del cual Dalto fue uno de los máximos responsables como pianista, arreglista y director musical.
Jorge Dalto es tan grande que apenás si cabe en esta humilde web, pero los gatitos de este tejado nos hemos empeñado en que los pocos melómanos que decidan acercarse por aquí recuerden la importancia de este impresionante pianista, tan desconocido por el gran público como lleno de talento.
Jorge Dalto, nacido en la ciudad de Roque Pérez, cerca de Buenos Aires, había participado , además de las nombradas, en grabaciones de gente tan importante como Mario Bauzá, Gato Barbieri, Carmen McRae, Tito Puente o Spyro Gyra, por sólo citar unos pocos.
Aquí le vemos junto a Ray Barreto, Ismael Miranda, Adalberto Santiago, Salvador Cuevas, Dave Valentin, Junno Faria, Salvador Cuevas y Yomo Toro, entre otros, interpretando Quitate Tú. El video nos muestra, además, un espectacular sólo de Junno Faria ejecutado con dos saxos a la vez y una divertida intervención del guitarrista Yomo Toro que se vuelve literalmente loco, cayendo al suelo con su instrumento. Pero por encima de todo deja constancia de la enorme calidad y presencia de un excepcional músico y pianista que, para desgracia del mundo de la música, se fue demasiado pronto.
Jazzy