Seguro que muchos de vosotros quedáis alucinados (como yo) al ver los programas de la tele donde transforman casas viejas y deterioradas en increíbles viviendas con los revestimientos más eficientes y el mobiliario más moderno. Este fue seguramente, un proyecto parecido a esos, en el que un viejo pajar ha sido convertido en una coqueta ‘casita’ de vacaciones.
Difícil decidir que nos gusta más de esta casa para los fines de semana y vacaciones ¿no? ¿la doble altura con balcón interior? ¿toda la madera de la casa pintada de blanco? ¿las vigas? ¿la chimenea de hierro fundido? ¿los muebles de aires rústico-francés mezclados con estilo industrial? ¿la sencilla cocina hecha con tres módulos bajos y un par de electrodomésticos? ¿el simple y fresco dormitorio? ¿el porche? ¿el jardín? … lo que os decía, dificilísima elección.
La casa en cuestión está en Bornholm una isla danesa situada en el mar Báltico entre Polonia y Suecia, lo sé, algo remoto, pero ese es también parte de su encanto :). Sería estupendo que empezáramos a importar con más frecuencia este estilo y rehabilitáramos pajares y graneros de nuestra España profunda, que tenemos miles abandonados ¿no os parece?, un estilo sencillo como este se integra bien en cualquier cultura y país.
Vía: nicety, jam kolektyw Fotografía y retoques: Jola Skóra, Diseño de interiores y estilismo: Agnieszka Suchora