Revista Espiritualidad
VIENTOS DEL ESPÍRITU - 44 Te es brindada mucha ayuda para que establezcas contacto consciente con los planos suprafísicos. Pero hace falta prudencia, pues es más fácil desviarte del Camino, cuya senda es estrecha, que mantenerte en él. Y aquí se necesitan algunos cuidados, todos basados en la humildad. De modo alguno temas el asedio de las fuerzas dispersivas, pero tampoco las desafíes. Además, no te juzgues sin preparación ni totalmente listo para la jornada. Es en la Luz interior donde siempre debes colocar tu atención, es en lo Alto donde siempre debes ver tu meta. Nada debe distraerte del verdadero Camino, que consiste en amar únicamente la Vida Superior y únicamente entregarte a Ella. Evita el interés por experiencias psíquicas. El trabajo espiritual no necesita fenómenos. Al contrario, para realizarlo, debes trascender lo sensorial y dedicarte al sagrado mundo del silencio. El silencio surge cuando no quieres nada, ni esperas recompensas. Puede ser que, en ese silencio, tengas experiencias visuales o auditivas y remenbranzas, y pueden ser positivas en tu formación interior. Pero, son pasajeras. Así como estás aprendiendo a leer el significado oculto de los hechos, y de los acontecimientos de tu vida material, podrás reconocer lo que llega a tu consciencia por los sentidos internos. Sabrás que la vida en las otras dimensiones es real y que los sentidos captan proyecciones de algo más profundo, que está en la base de toda la existencia y que no tiene vida fenoménica. Es esa Esencia Última, sin nombre, color, forma ni aroma, lo que debes buscar. Las experiencias que tengas por el camino son meras oportunidades de servicio y de crecimiento, y a ninguna de ellas debes apegarte, por más preciosas que puedan parecerte. Fuente: Vientos del Espíritu, Trigueirinho