Revista Cultura y Ocio
Bodega Torres
Viña Esmeralda 2008
85% Moscatel de Alejandría – Gewürztraminer 15%
11,5% Grad. Alc.
Catalunya D.O. Barcelona España.
En una de las despedidas de Lima, Jennifer y Juan Carlos gentilmente nos agasajaron con esta botella. Ya aquí pensábamos si este vino blanco aguantaría estos cinco años y medio, por otro lado, es de una de las bodegas más prestigiosas de España, o sea, los compadres saben hacer vino, así que curiosos hoy abrimos esta botella.
Es de un amarillo muy brillante, color de miel, denota una mediana densidad.
En nariz es herbáceo de inicio, sólo hacia la tercera copa Cris le encuentra notas afrutadas, como de piña muy madura, dulzón.
En boca, de una mediana densidad, las notas herbáceas y aquella piña madura se refrendan, es inclusive algo amantecado, con un retrogusto algo dulzón, y un toque como a castañas.
Recordamos que hace algún tiempo tuvimos una grata experiencia con un chenin blanc sudafricano también de una añada algo lejana. Beber un Viña Esmeralda de una cosecha más reciente muy probablemente sea una experiencia muy diferente, tal vez más fresco, más juvenil. Este caldo estaba con un color amarillo muy denso, y el sabor algo dulzón de la fruta madura, y aunque no encontramos las notas florales (creíamos encontrarlo por el mayor porcentaje de moscatel, son más notas herbáceas), el vino estuvo inclusive algo untuoso, de una densidad en boca inesperada, y con una leve sensación amantecada, muy rico, diferente. Ofreció una buena experiencia acompañando rodajas de takuan (nabo encurtido japonés, esos bien amarillos), y nos dejó claro que ni siempre los vinos blancos aguantan poco tiempo. Buscaremos por aquí algún otro ejemplar de una añada más reciente para ver el contraste, aunque no sabemos si lo encontraremos en tierras brazucas, por ahora, este 2008 a mediados del 2014 resultó toda una agradable sorpresa.