Revista En Femenino

Virtudes convertidas en defectos - La magia está en creer

Publicado el 29 mayo 2013 por Bebloggera @bebloggera
Enviado por loquepiensoenletras desde Chile 
La primera vez que me pregunté en qué momento las virtudes habían pasado a convertirse en defectos fue cuando me dijeron "eres demasiado inocente a veces"; ni hablar de cuando uno de los amores de mi vida no quiso tener nada conmigo porque supo que sería el primero, ¿no se supone que eso es casi un motivo de orgullo o me quedé pegada en la época medieval? ¿En qué momento el esperar para "ese alguien especial" pasó a ser un defecto y no una virtud?
Virtudes convertidas en defectos - La magia está en creer

Ha habido otras situaciones en que me han dicho lo mismo casi como reto, yo me pregunto qué pasa con la visión. Por ejemplo:- ¡Es que eres demasiado ingenua!- ¡Es que confías demasiado en la gente!-Es que te pasa por ser muy buena persona.- ¡Es que eres demasiado confiada!O sea, es verdad que todo en exceso es malo, es verdad que muchas veces las personas abusan de las otras cuando se dan cuenta que son "buena persona", pero también es verdad que una actúa en base a sus propios actos pasados; como decía mi abuelita, "el ladrón cree que todos le van a robar", y es comprensible, pero, ¿acaso uno no puede ser de verdad, así sin que parezca algo extraño o criticable? No digo que sea una Sor Teresa de Calcuta ni me estoy promocionando como la próxima santa para Chile, pero confío en que alguien me devolverá algo si se lo presto, porque si a mí me prestan algo yo lo devuelvo. Mi mejor amigo es hombre y jamás tuve algo con él, entonces por qué no creer en la amistad entre hombre y mujer (y ojo que es guapo, pero nunca me movió ni una sola hormona)... Si un mino me dice que tiene una amiga con la que nunca ha pasado nada, no tengo porque no creerle porque con mi mejor amigo guapo lo he vivido. Es verdad que más de una vez han traicionado mi confianza o se han aprovechado de mí, pero son los riesgos que se corren por ser así, finalmente cuando pasa eso con las personas, el abrir los ojos te hace ver que en realidad no valía la pena tenerlas al lado y termina siendo para mejor. Una vez le dije a alguien y lo confirmo ahora, prefiero mil veces sufrir una decepción que andar por la vida de desconfiada o pasándome rollos por todo. Como dice el eslogan de un conocido comercial de navidad: La magia está en creer.


Volver a la Portada de Logo Paperblog