Siguiendo con la tradición de repaso a bandas de música electrónica de los años 80 que iniciamos hace ya unas semanas, y que de forma salteada vamos introduciendo, llega el turno de una de las formaciones consideradas como un fenómeno “one hit wonder”. La canción estrella en cuestión es la bizarra y vanguardista “Fade to grey” y el grupo fue la unión de varios personajes con mucha inquietud musical en su interior, liderada por el carismático Steve Strange, la banda Visage.
En torno a este personaje del mundo nocturno londinense, que había sido incluso gerente de varios clubes nocturnos y cabarets, se reunieron gente tan válida como el componente de Ultravox! Billy Currie, que tras la marcha del cantante de su formación John Foxx andaba dando vueltas por ahí, el ex-Thin Lizzy Midge Ure (a la larga líder de los renovados Ultravox) y otra gente como Barry Adamson al bajo, Rusty Egan a la batería, el músico de peculiar nombre Dave Formula y el guitarrista John McGeoch.
Iremos a analizar el debut de esta formación, exitoso al calor principalmente de “Fade to grey” como hemos referido, que sería el primero de los 3 discos que acumularon en su trayectoria que se extendió hasta 1984. Con una estética neorromántica, con unos maquillajes exagerados y casi derivados de los mimos por parte de Steve Strange y con elementos ciertamente innovadores como introducir frases en francés en sus canciones, Visage se presentaba como un interesante proyecto musical. Tras esta introducción breve, pasemos a introducirnos en el primer disco de esta formación, a día de hoy olvidada dentro de la historia de la música moderna.
La canción que concede su nombre tanto al disco, como a la banda, es de las composiciones más interesantes del debut, siendo además la que se nos presenta en 1er. lugar. Un sonido más cercano a la nueva ola, derivado de mezclar melodías de sintetizador con guitarras eléctricas muy enérgicas y una tremenda vitalidad no solo en su música, sino en su interpretación vocal. También puede recordar en parte a ciertas piezas de Ultravox; el sello de Ure y Currie está presente. Es ciertamente desconocido el clip de la canción Visage, el cual viene a recrear el ambiente nocturno por el que Strange se movía como pez en el agua. No en vano, el Blitz londinense regentado por Steve Strange sale en primera plana del video y de forma expresa. “Blocks on blocks” es de las piezas elaboradas de forma más sintética del debut de Visage. Tras las mezcla de guitarras y sintetizadores del comienzo, aquí pasamos a una melodía más deshumanizada, en la que destaca la robotizada voz de Strange y también el bajo de Adamson, que suena muy sintetizado. Las guitarras aquí se dejan de lado. “The dancer” es una instrumental bastante enérgica, de la que a veces se ha valido Midge Ure en su carrera en solitario para sus conciertos, que está unida umbilicalmente a “Blocks on blocks” por una salida e intro a cargo de la percusión de Rusty Egan. Será uno de los 3 temas instrumentales que Visage ofrecerán en este su disco de debut. “Tar” tiene de peculiaridad la robotizada voz de Strange. El ritmo de la canción es atropellado, muy vanguardista y heredero del sonido que comenzaron los Kraftwerk y que en el mismo Reino Unido desarrollaban muy bien en aquellos meses gente como Gary Numan o precisamente el ex-Ultravox! John Foxx con su debut Metamatic. Son interesantes los matices sonoros que asemejan los sonidos de viento que aparecen en ciertas partes de la canción. Con una intro muy electrónica, se da paso a la oscura y exitosa “Fade to grey”. Los sintetizadores y las bases de la canción son increíbles para la época y esas primeras frases ya mencionadas en francés por una voz femenina, dan paso a la mayor gloria cantada por Strange al micrófono. Esta canción tiene en mi opinión una fuerte carga siniestra en su sonido y melodía. Las melodías de teclado y los diversos sintetizadores que se entrecruzan en esta pista dan forma a un clásico sin dudas de la música electrónica. El clip grabado es otro ejemplo perfecto de la nueva ola y el movimiento neorromántico, en el que vemos a Strange en proceso de caracterización, maquillado a tope, a ratos sin ningún rastro de maquillaje y en otras ocasiones alucinando de ver como su cuerpo se le recubre de una franja de escamas rosadas que le invaden el torso. Mencionar que este estático videoclip fue una de las primeras joyas audiovisuales creadas por el tándem ex-10CC Godley & Creme.“Malpaso man” es de los momentos más graciosos del disco, básicamente por los coros que entonan el nombre de la canción. Aporta cierta contundencia al disco por su instrumentación y me recuerda algo a “Western promise” del “Vienna” de Ultravox (claro, con Currie y Ure por aquí es normal). Otra pista destacable del disco de presentación en sociedad de Visage es “Mind of a toy”. Vuelve a estar unida a su predecesora con continuidad sonora, como sucede en gran parte del disco, y con un sonido que se mueve entre lo inocente y lo siniestro, esta pieza es otro ejemplo del vanguardismo del proyecto liderado por Strange. En su textura y melodía se aprecia un sentido muy distinto al de otras canciones de la época. No estamos pues ante un ejemplo claro de techno pop. “Mind of a toy” dispuso de un tétrico videoclip a base de marionetas, con un final un tanto siniestro con ese incendio de una casa de muñecas al pie de las escaleras dispuestas en un oscuro plató, sobre cuyos escalones está sentado Steve; siempre me ha dado por pensar si Ridley Scott se inspiró en este videoclip para recrear la vida del ingeniero genético Sebastian en “Bladerunner”. “Moon over Moscow” es la 2ª instrumental que nos encontramos y quizás sea una pieza algo reiterativa en su melodía. Continuando su melodía se da paso a un nuevo juego de palabras con el nombre del grupo, que da lugar al tema “Visa-age”. Ésta es sin duda de las piezas más interesantes de la parte final del disco, con su tono casi amenazante y sus diversos matices electrónicos, sin obviar la última canción, y por consiguiente última instrumental de las 3 que contiene el disco, titulada “The steps”. Para el cierre se dispone una composición fuertemente siniestra y que para mi gusto influye de forma decisiva en la percepción del disco.
Visage tuvo una buena aceptación con su debut, como ya hemos referido gracias a “Fade to grey”, que a la par ha sido el tema que les ha permitido pasar a la historia de la música y también formar parte de innumerables recopilatorios de los grandes éxitos de los ochenta, de música electrónica, de techno pop, etc. La portada, de fuerte regusto neorromántico y manierista, muestra un paso de baile con esos atuendos y maquillajes tan característicos de Strange en aquellos días. Ese momento parece que Steve está tocando el violín con el cuerpo de su acompañante y personalmente se me evocó en una situación delirante una noche de juerga cuando un colega se enrollaba con una tía en un bar, allá por diciembre de 2003 (no hagan especialmente caso a esto; es una de tantas chorradas que introduzco por acá ocasionalmente que no sabrán entender lógicamente).
Para el siguiente disco, titulado “The Anvil”, Visage se mantuvo en pie creo que con casi todos los componentes que integraban el grupo en el disco de debut que hemos analizado. Todo ello a pesar de que por ejemplo la dupla formada por Currie y Ure ya había reformado Ultravox con un notable éxito. Canciones como “Night train”, la íntima y preciosa instrumental “Whispers” y algunos otros ejemplos como “The damned don't cry” dieron forma a un aceptable disco de continuación, pero que carecía de algún tema con el gancho de “Fade to grey”.
La desbandada en el siguiente trabajo, el cual tardaría en editarse hasta 1984, ya fue generalizada y a cambio entraron gente como Gary Barnacle para secundar a un Steve Strange que vería como la crítica y el público ignoraron quizás de forma algo exagerada al aceptable “Beat Boy”. Y digo que quizás este disco no se mereciera un desprecio tan acusado, ya que incluía canciones interesantes como la que le concede el nombre o la estupenda composición pop (con matices de saxofón muy elegantes y emotivos) “Love glove”, la cual además dispuso de un videoclip grabado en Egipto bastante decente.
No obstante, el rechazo fue como ya he referido bastante notable y Visage no tenía el peso suficiente (a pesar de “Fade to grey”) como para aguantar un ninguneo de esta talla, y más tras la discreta edición de su 2º disco “The Anvil”. Con ello Visage terminó por disolverse. Pero lo peor no fue eso, lo peor vino cuando Steve Strange se hundió personalmente y se vio arruinado y obligado incluso a robar en alguna tienda, con lo que llegó a ser arrestado. Steve más recientemente ha sido partícipe de algún reality de tv de famosos en el Reino Unido (no sé qué sera peor), y de forma más digna reformó Visage en Visage Mk II, aunque su actividad a día de hoy no es muy frenética que se diga.
Este disco de debut que hemos presentado, tras escucharlo varias veces, me deja un regusto oscuro y algo siniestro. Principalmente creo que esa percepción se basa en el protagonismo de sus singles “Fade to grey” y “Mind of a toy” (con sus respectivos clips promocionales) y también a otras piezas como el cierre de “The steps”. No obstante, creo que su carácter es mucho más abierto, ya que otras piezas son de corte enérgico como la propia “Visage” y otros temas como “Tar” o “Blocks on blocks” son de textura más amable.
Visage es un perfecto desconocido para casi todo el mundo. Algunos, tras escuchar “Fade to grey”, les sonará de algo la canción, con esa textura algo oscura y tan rotunda. Resulta interesante, a nivel de investigación, meterse en aventuras musicales como ésta y descubrir más sobre grupos que aparentemente solamente editaron una canción. Quizás esta obra sea más apropiada para los meses de invierno, pero como hemos iniciado hace unas semanas la revisión de obras del techno-pop y la new wave ochentera, creo que les había llegado la hora. ¿Alguna sugerencia para la revisión de las próximas semanas? En la medida de lo que ustedes propongan, veré qué puedo hacer.