Viscerales (2):

Ante la inminente presentación de Viscerales (el sábado 29, a las diez de la noche, en Zamora, en el Avalon Café) y aunque aún no tengo el libro (pero sí el pdf), voy a ir subiendo aquí párrafos sueltos de los textos, empezando por el prólogo:
PRÓLOGO / MARIO CRESPO:

Al igual que yo, los autores que colaboran en esta antología han hecho su vaciamiento particular, cada uno en su estilo y a su modo. Lo que el lector va a encontrar en este libro es un compendio de cuentos, poemas, prosa poética e incluso fragmentos de obras teatrales, marcado por un denominador común: el desahogo.
AY, MI ESTIMADO SEÑOR / ENRIQUE VILA-MATAS:

Debido a mi trabajo, soy experto en los rechazos que se producen en el ámbito literario. ¿Es usted escritor o ha intentado serlo? Tanto si lo es como si ha querido serlo, usted ha tenido que conocer en algún momento de su vida el rechazo. Es posible que alguien le haya escrito alguna vez una carta donde muy educadamente le hayan dicho: "Estimado señor, nos ha causado una agradable impresión su manuscrito, pero..."
15 APUNTES PARA LA DESTRUCCIÓN O LA AUTODESTRUCCIÓN DE D.V/ DÉBORAH VUKUSIC:

2. Un día encontró una canción de Françoise Hardy y mi novio se obsesionó con ella. La pone una y otra vez en youtube para ver su foto y oír su voz. Ya no es capaz de escucharme ni de mirarme a los ojos. No sé qué hacer, si operarme o largarme. He pensado en grabarle una canción como si fuera ella que le diga que me he muerto. Una pena que no entienda el francés.

ANCHURA TAN SUYA/ TOMÁS SÁNCHEZ-SANTIAGO:
Se le vio manejar la madrugada retrasando los colores de la cosas, como ese último sirviente que invitaría a insectos y a mendigos para alargar la fiesta. Él no quería que el agua fuera agua, que el carbón fuera humo, que sonaran a muerte los huesos en las frutas.
ULISES, UN PUTO TURISTA JAPONÉS/CARLOS SALEM:

Y años después, no en Canadá sino en Australia, volví a tener noticias de él. Michael, un periodista cultural, me reconoció en un bar, mientras yo intentaba pelear con un canguro embalsamado (¿o era un oso?), y declamaba un viejo poema mío para impresionar a una muchacha coreana que había llegado allí con un muchacho de Kansas que acabó dejándola por un chico somalí. Cosas de la globalización.
EL MACHO ICÓNICO/ LUCÍA FRAGA:

En mi mesa se amontonan los libros. En mi mente, los hombres que han pasado por mi cuerpo. Yo no estaba allí. Yo caía en un vacío constante que me dejaba prácticamente inconsciente. Mi figura, el tallo de una flor a punto de romperse. Mi ser un no-ser en expansión. Noches de sexo inseguro y flaqueza en las piernas. Noches de alimañas antropomorfas. Noches trasnochadas de alcohol y maría.
VISCERALES. Edición de José Ángel Barrueco y Mario Crespo. Ediciones del viento, La Coruña, 2011.