Hacía mucho que no entraba en la Biblioteca Nacional,de hecho, la exposición permanente ya no es permanente y en ese espacio hacen exposiciones temporales muy completas. Durante mi visita hubo tres exposiciones diferentes, y, por supuesto, las visité todas.
Emilia Pardo Bazán. El reto de la modernidad
Fue la que llamó mi atención en primer lugar, porque Emilia Pardo Bazán es una de mis heroínas. Ya he reseñado algunos de sus libros por aquí, pero su vida es interesantísima. A pesar de que la España del siglo XIX era un mundo de hombres, ella estaba en todos los saraos literarios y se hizo un nombre por su pluma innovadora. Además, vivió su vida como le pareció, desafiando las convenciones y dando prioridad a su carrera y con un nivel de libertad inconcebible para la época. ¡Incluso para el siglo pasado estaba adelantada!
La exposición aborda muchas facetas de su vida, desde la más personal hasta los distintos palos que tocó (política, literatura, feminismo, ensayo... la llamaban "la inevitable" por algo). La verdad es que su vida y obra, por extensas, son casi inabarcables, pero la selección que han hecho de cartas, ediciones de sus obras, fotos, retratos y documentos de todo tipo es muy acertada. En definitiva, ¡muy recomendable!
Luces del norte: manuscritos iluminados de la Biblioteca Nacional de España
Salí de la Biblioteca Nacional para encontrar un cartel en el que se hablaba de otra exposición, así que de nuevo entré para verla. Esta es deliciosa. Muestra manuscritos iluminados del norte de Europa, la mayor parte franceses, aunque también hay algunos de otros países como Inglaterra o Países Bajos. Había miniaturas de todo tipo, con detalles impresionantes explicados en los carteles, y se tocan varios tipos de libros (no solo religiosos, también legales, científicos...). Vamos, una maravilla.
Dante Alighieri en la BNE: 700 años entre infierno y paraíso
No soy muy fan de Dante porque la Divina Comedia me aburrió mortalmente pero ¡ya que estaba allí! Esta exposición es más pequeña, ya que abarca una sala, pero en ella hay todo tipo de manuscritos y grabados. Los carteles se me quedaron un poco cortos, no obstante. Vamos, que no es una exposición a la que recomiende ir específicamente, pero, si vas a las otras, no está de más pasarse.