
La verdad los tintos ni fu ni fa, pero los blancos si me gustaron bastante, aunque tengo que reconocer que no entendí nada. Jejeje. Todo ese lenguaje de las catas es muy raro, pero me gustaron los vinos, me gustó el lugar y lo mejor, fue un ratito de descanso. Que tantos días andando… mis patitas estaban sensibles, jejeje.
