Memento Park - Glo Ribas- Budapest 2016
En Budapest hay multitud de cosas para ver y hacer tanto en Buda como en Pest pero una vez se sale del casco histórico de la ciudad también se pueden encontrar lugares interesantes des del punto de vista histórico. Uno de estos lugares es el Memento Park, un espacio donde se conservan 42 de las muchas esculturas comunistas que ocupaban las calles de la capital húngara durante ese periodo.A continuación compartimos con vosotros las claves para visitar este museo tan peculiar.
¿CÓMO LLEGAR?
Para llegar al Memento Park con transporte público lo podéis hacer siguiendo estos dos sencillos pasos:
- METRO: Línea verde hasta la parada Kalenföld Vasútállomás.
- BUS: Línea 101 o 150 (6,5Km) hasta la parada: Memento Park.
PRECIOS - HORARIOS
Precios
- Adultos: 1500 HUF
- Estudiantes: 1000 HUF
- Budapest Card: -20%
- Hungary Card: -30%
- Apertura del parque a las 10h hasta el atardecer
El Memento Park es un museo al aire libre en que se conservan monumentos, estatuas y placas de la época comunista de Hungría (1949-1989). Estas 42 esculturas se encontraban guardadas en un almacén durante muchos años y se decidió que volvieran a ver la luz. Es un parque, inaugurado en 1993, diseñado por Akos Eleöd después de ganar un concurso organizado por la Asamblea General de Budapest.
OPINIÓN PERSONAL
Tras leer el post de nuestros amigos de Cómete el Mundo y después de leer varias opiniones nos entró el gusanillo de visitar la "Disneylandia Socialista".Nos gusta la historia y si le añadimos la posibilidad de ver un museo diferente de lo que estamos acostumbrados, hizo que no nos lo pensáramos 2 veces para ir hacia allí.
Cuando llegamos nos dimos cuenta porque el termino "Disneylandia Socialista"le iba como un anillo al dedo. Las esculturas, los monumentos y las placas hacen que tu mente vuele hacia la época comunista del país y te hagan alucinar por su tamaño colosal. Pero nos llevamos una pequeñita decepción porque nos lo imaginábamos un poco más grande de lo que es pero bueno eso no os tiene que echar para atrás porque es un must en una visita a Budapest.
Lo divertido es cuando terminas la visita y vuelves a la entradas. Allí el "frikismo" se hace tangible cuando te encuentras una antigua cabina de teléfonos en la que puedes llamar a diferentes diales, que están apuntados en un libreto que hay colgando de una de sus paredes, para escuchar las voces de los lideres comunistas.
Y ya es alucinantes cuando llegas a la tienda de recuerdos porque encuentras póster, pins/insignias, postales, tazas de hojalata, mecheros, petacas, gorras, imanes, pasaportes... es curioso ver según que "souvenir" por eso recomendamos que le echéis un ojo aunque no compréis nada.