La entrada del colegio parece sacada de un cuento del lejano Oriente.
Los pasillos recrean diversos lugares de la época andalusí: desde uno de los miradores de la Alhambra, los arcos de la Mezquita, los jardines de naranjos del Generalife o la jaima del mismo Califa.
Expositores con objetos propios de la cultura musulmana, vidrieras, fuentes, mosaicos,...
Ambientes y decoraciones que no dejan indiferente a nadie y trasladan a los más pequeños a lugares inimaginables.
Tanto viaje merece de un buen descanso... ¿o no?