En el blog y copiando descaradamente el post que ha publicado mi madre, para que luego no diga que no lo leo!!!, os invito a dar un paseo por el que fue el verdadero refugio del creador, su jardín en Marrakesch: el Jardín de Majorelle. Un jardín lleno de plantas crasas y cactus que crecen bajo las altas palmeras, ideado en tonos de contrastes con verdes, grises y sobre todo azules. Tuve la suerte de visitarlo y la os puedo asegurar que las fotos no le hacen justicia.




