Visitando los lugares del INFERNO de Dan Brown

“En un mar de torres y cúpulas, una fachada iluminada dominaba el campo de visión de Langdon. El edificio era una imponente fortaleza de piedra, con un parapeto dentado y una torre almenada y con matacán, que se elevaba hasta los noventa metros de altura. Langdon se incorporó de golpe…Conocía bien esa estructura medieval…Era única en el mundo”.

Florencia desde la Piazza Michelangelo

Tal como lo advirtiera Robert Langdon, Florencia era única en el mundo y no podíamos estar mas encantados con el Inferno de Dan Brown, puesto que coincidiendo con su publicación, nos comunicaban que eramos los agraciados en el sorteo de dos semanas de curso de italiano en una prestigiosa escuela de Florencia.

No tardamos mucho en leernos el libro, fue adictivo, y coincidiran conmigo quienes han visitado Florencia que resulta mas emocionante leer cada paso de la historia de Langdon rebuscando en tus recuerdos la calles y edificios de la ciudad de Dante, sin embargo, tendríamos la oportunidad de volver a Florencia y re-hacer los pasos de Robert Langdon y es este nuestro pequeño homenaje al Inferno de Dan Brown.

Piazza di San Firenze. Al fondo la Torre de la Badía (izq) y Torre del Bargello (der).

“…paso por detrás del Palazzo con su torre almenada y su reloj con una sola aguja…; me abro paso entre los primeros vendedores de la Piazza di San Firenze, con sus roncas voces y su aliento a lampredotto y aceitunas al horno. Tras pasar por delante del Bargello, me dirijo hacia el oeste en dirección a la torre de la Badia y llego a la verja de hierro que hay en la base de la escalera. Aquí no hay lugar para dudas”. 

Por estas pequeñas y centricas calles transcurre la persecución a Zobrist, que terminaría con su suicidio desde lo alto de la Torre de la Badia, sin embargo es a las afueras del centro historico donde comienza la persecución a Robert y Sienna, quienes desde la Vialle Machiavelli intentan entrar a la ciudad que esta fuertemente custodiada.

Vialle Niccolò Machiavelli

“La Vialle Niccolò Machiavelli estaba considerada la más elegante de las avenidas florentinas. Sus amplias curvas rodeadas de frondosos setos y árboles de hoja caduca la convertian en uno de los lugares favoritos de ciclistas y entusiastas de los Ferraris”.

Vialle Niccolò Machiavelli y la Porta Romana. Acceso al casco antiguo de Firenze

Desde la motocicleta en la que escapaban Robert Langdon y Sienna perciben los controles policiales que se efectuan en la Puerta Romana – punto de acceso al centro historico – es así que deciden camuflarse entre los estudiantes del Instituto Statale d’Arte y posteriormente saltar desde allí las vallas que los separan de los Jardines del Palazzo Pitti.

Porta Romana.

“El sendero de entrada al Istituto Statale d’Arte era icreíblemente hermoso, de apariencia casi regia. Unos robles enormes lo bordeaban a cada lado, creando una especie de dosel que enmarcaba el edificio del fondo”.

Entrada al Istituto Statale d’Arte

Después de burlar el control policial de la Porta Romana, Langdon y Sienna se mezclaron con los estudiantes  del Istituto Statale d’Arte y desde allí lograron acceder a los Jardines del Palazzo Pitti, continuando así con el acceso a centro histórico de Florencia.

Jardines del Palazzo Pitti.

“«Langdon la condujo a la izquierda y comenzaron a descender una pronunciada pendiente. Al salir de la arboleda, el Palazzo Pitti quedó a la vista.
—No está mal la casita —susurró Sienna.
—Sí. Discreta, como les gustaba a los Medici —respondió Langdon irónicamente.
La fachada del Palazzo Pitti, que todavía se encontraba a quinientos metros, dominaba el paisaje. El almohadillado rústico de la fachada le daba al edificio un aire de autoridad implacable; la repetición de ventanas con postigos y puertas arqueadas acentuaba este efecto.»”

Palazzo Pitti

Desde los Jardines del Pallazo Pitti, Langdon y Sienna lograron escabullirse hasta encontrar el acceso secreto a el Corredor Vasariano, acceso creado por Giorgio Vasari por ordenes del el gran Duque Cosme I, con el fin de conectar su lugar de residencia (Palazzo Pitti) hasta sus oficinas en el Palazzo Vecchio al otro lado del río Arno. Actualmente este corredor es refugio de grandes obras de arte y no esta abierto al público y solo recibe visitantes ilustres, así que nuestro recorrido continuaría por el Ponte Vecchio.

Ponte Vecchio

“Langdon y Sienna echaron un vistazo por el mirador. Estaban en el Ponte Vecchio, el puente medieval de piedra que servía de acceso peatonal al centro de la ciudad. A sus pies, los turistas disfrutaban del mercado que se celebraba en el puente desde el siglo XV. En la actualidad, los puestos eran en su mayoria de bisuteria y de joyas, pero no siempre había sido así. Originalmente el puente era la sede del mercado de carne.”

“MAS CONVENÍA QUE FLORENCIA HICIESE A LA PIEDRA QUE, ROTA, GUARDA EL PUENTE UN SACRIFICIO MIENTRAS PAZ TUVIESE”

“El Palazzo Vecchio parecía una gran torre de ajedrez. El imponente edificio, de robusta fachada y sólidas almenas cuadrangulares, estaba convenientemente situado en la esquina sudeste de la Piazza della Signoria…Su inusual torre, que se elevaba en el centro de la fortaleza, destacaba en el perfil de Florencia y se había convertido en un inimitable símbolo de la ciudad.”

Palazzo Vecchio

Una vez finalizada la travesía por el Corredor Vasariano, Langdon y Sienna se adentraron en el Palazzo Vecchio y su primer destino fue el mural de Vasari ubicado en el salon de los Quinientos.

“En su momento el salón de los Quinientos fue la sala más grande del mundo. Fue construido en 1494 para la celebración de las juntas del Consiglio Maggiore, el consejo mayor de la república (formada por quinientos miembros, de ahí su nombre)”.

Salón de los Quinientos.

“Langdon levantó la mirada hacia el otro extremo del salón, donde seis dinámicas esculturas – Los trabajos de Hércules – se erguían como un grupo de soldados. Ignoró deliberadamente la de Hércules y Diomedes, que representaba sus cuerpos desnudos enzarzados en un extraño combate de lucha libre en el que se incluía un agarrón de pene, ante el cual Langdon siempre se encogía de dolor… Más agradable a la vista era el impresionante El genio de la Victoria, de Miguel Ángel, que dominaba el nicho central de la pared sur. De casi tres metros de altura, esta escultura fue creada para la tumba del Papa ultraconservador Julio II – Il Papa Terribile -”.

Los trabajos de Hércules

El genio de la Victoria. Miguel Ángel

 “El tamaño de esa tremenda confrontación militar era descomunal: quince metros de largo y más de tres pisos de altura. En tonos marrones y verdes, la enorme pintua mostraba una violenta colisión de soldados, caballos, lanzas y estandartes en una ladera pastoral… – Vasari, Vasari -susurró Sienna-. ¿Y en algún lugar de este mural se encuentra un mensaje secreto?…CERCA TROVA”.

La Battaglia di Marciano. Giorgio Vasari.

“-¡Lo veo!-exclamo Sienna, señalando el cuadrante superior derecho, justo el lugar exacto…. Langdon deseó tener unos ojos más jóvenes.” Y nosotros también; nuestra visión no es precisamente la de un lince, pero creo que desde ese punto, sin binoculares y una lupa es bastante díficil – casi imposible – ver el mensaje Cerca Trova”.

“Lo Studiolo. En la pared opuesta al mural de Vasari, justo enfrente de las palabras ocultas -Cerca Trova-, y detrás de la puerta de cristal, había ua pequeña cámara sin ventanas. Se trataba del estudio secreto de Francesco I…su interior estaba repleto de hermosas obras de arte. Más de treinta pinturas adornaban las paredes y el techo, tan cerca unas de otras que casi no había espacio vacío. El vuelo de Ícaro…, La alegoría de los sueños…,Prometeo recibiendo las joyas de la Naturaleza”.

Lo Studiolo.

“La máscara mortuoria de Dante está a la vueta de esa esquina -le dijo Marta a Sienna-. Se exhibe en un estrecho espacio llamado L’andito que, en esencia, es un corredor que une dos salas más grandes. La máscara está dentro de una vieja vitrina que la mantiene oculta hasta que uno se encuentra a su altura. Por esta razón, muchos visitantes pasan de largo sin ni siquiera verla”.

Máscara di Dante. Inferno Dan Brown

“Las paredes de la estancia estaban cubiertas por antiguos mapas, y en el centro había un enorme globo terráqueo. Langdon se quedo mirando la gran esfera metálica y comenzó a asentir, primero poco a poco, y luego con más vigor.

-Por aquí- dijo entonces, y salió corriendo en dirección al globo. -

¿Robert? -preguntó cuando finalmente lo alcanzó-. ¡¿Se puede saber adónde vas?

-Por Armenia- respondió él….Armenia -repitió Langdon con la mirada al frente-. Confía en mí”.

Sala de los Mapas Geográficos

“Hemos encontrado Armenia, ¿y ahora qué?… Langdon sabía que no había tiempo para explicaciones. En vez de eso, extendió la mano, agarró el mapa por su grueso marco de madera y tiró de él. El mapa, junto con una amplia sección de su pared y su revestimiento de madera, se abrió, y dejó a la vista un pasaje oculto. – Vaya con Armenia – dijo Sienna, impresionada”.

Armenia. Sala de los Mapas Geográficos.

 “A mediados del siglo XIV, el duque de Atenas se hizo con el poder y construyó esta salida secreta para escapar en caso de que lo atacaran. La llaman la escalera del Duque de Atenas, y desciende hasta una angosta puerta que tiene salida a una calle lateral. Si llegamos a ella, nadie nos verá salir del edificio. -Señaló uno de los modelos-”.

Estructura “oculta” del Palazzo Vecchio

Puerta de escape de Langdon y Sienna. Palazzo Vecchio

“A pesar de ser conocido como la iglesia de Dante, el santuario de la Chiesa di Santa Margherita dei Cerchi en realidad es más una capilla que una iglesia… Según la tradiciónn, fue en esta iglesia donde Dante vio por primera vez a los nueve años de edad a Beatrice Portinari, de quien se enamoró a primera vista y a quien siguió amando durante toda la vida.”

Dante y Beatrice Portinari. Chiesa di Santa Margherita dei Cerchi

“Langdon se volvió instintivamente hacia la izquiera y echó un vistazo a la modesta tumba de Beatrice Portinari. Era la principal razón por la que la gente visitaba esa iglesia; aunque no tanto para ver la tumba misma como por el famoso objeto que había a su lado. <Una canasta de mimbre>…Se había convertido en algo así como la santa patrona de los amantes desgraciados y, según la larga tradición, éstos depositaban la petición manuscrita en el cesto con la esperanza de que Beatrice interviniera en nombre del poeta e hiciera que alguien les quisiera mas, o les ayudara a encontrar el verdadero amor.”

Tumba de Beatrice Portinari. Chiesa di Santa Margherita dei Cerchi

 En la Chiesa di Santa Margherita de Cerchi Langdon y Sienna encontraron una pista que los llevaría en dirección al Batisterio de San Juan y las Puertas del Paraiso.

Batisterio visto desde el Campanario de Giotto

“Aunque Langdon lo consideraba uno de los edificios más impresionantes de Florencia, su localización siempre le había parecido un poco injusta. En cualquier otro lugar del mundo, ese edificio habría sido el centro de atención. Allí, sin embargo, a la sombra de sus dos colosales estructuras hermanas, daba la impresión de ser el más insignificante del grupo..”

Puertas del Paraiso de Ghiberti. Baptisterio de San Juan.

Historia de Moisés

Historia de José.

Historia de David y Goliat.

Historia del Rey Salomón y la reina de Saba

“Las relucientes puertas del paraíso de Ghiberti estaban adornadas con diez paneles cuadrados, cada uno de los cuales representaba una importante escena del Antiguo Testamento. Del jardín del Edén de Moisés, pasando por el templo del Rey Salomón, la narración esculpida por Ghiberti se desarrollaba a través de dos columnas verticales de cinco paneles cada una”.

Mosaico Batisterio de San Juan.

“…Dice la leyenda que al entrar en el Baptisterio de San Juan es físicamente imposible no levantar la mirada. A pesar de haber visitado muchas veces el lugar, Langdon volvió a sentir esa mística atracción y dejó que su vista se alzara al techo.”

“En Florencia se encontraba una de las fuentes bautismales más famosas del mundo. Durante mas de setecientos años había sido utilizada para purificar y bautizar a jóvenes cristianos, entre los cuales se encontraba Dante Alighieri.”

Pila Bautismal del Batisterio de San Juan.

“Tenemos que salir de aquí, ahora. Si yo te he encontrado, la gente que intenta matarte también lo hará. Hay muchas cosas que todavía no sabes. Debemos ir a Venecia. Ahora mismo. Lo difícil será salir de Florencia sin que nos vean”.

Al salir del Baptisterio Langdon, Sienna y el doctor Ferris tomaron rumbo a la estación de trenes de Santa María Novella en dirección hacia Venecia…Nosotros también lo hicimos despidiendonos desde la Piazza del Duomo.

Santa Maria dei Fiori.

“La estación de tren de Santa Lucía es una elegante estructura baja hecha de piedra gris y cemento. Fue diseñada en un estilo moderno y minimalista, y su fachada está libre de todo adorno salvo un único símbolo: unas letras FS aladas (Ferrovie dello Stato)”.

Estación de tren Santa Lucia. Venecia

“…justo al otro lado del canal, la icónica cúpula verdigrís de San Simeone Piccolo se elevaba en el cielo del atardecer. La arquitectura de esa iglesia era una de las más eclécticas de toda Europa. La inusual y prominente cúpula y su santuario circular eran de estilo bizantino, mientras que la pronaos con columnas de mármol había sido claramente construida siguiendo el estilo griego del Panteón de Roma”.

Chiesa di San Simeone Piccolo.

“Sin intención alguna de esperar, Ferris se hizo cargo del asunto y, con un generoso fajo de billetes, rápidamente convocó una lustrosa lancha hecha de caoba sudafricana; toda una limusina acuatica”.

“Al tomar uno de los recodos del canal, la enorme cúpula de la iglesia de San Geremia quedó a la vista. -Santa Lucía- susurró Langdon… -Sí, Santa Lucía, ¡La santa de los ciegos! Conocen la historia, ¿no?… Lucía era tan hermosa que todos los hombres la deseaban. Para mantener su pureza y virginidad, decidió arrancarse los ojos…

Restos de Santa Lucía. Chiesa di San Geremia

“…Buscad al traicionero dux de Venecia que cortó las cabezas de los caballos y arrancó los huesos de los ciegos. Animado por la coincidencia, se preguntó si eso no sería una críptica indicación de que santa Lucía era la persona ciega a la que el poema hacía referencia”.

Ponte Rialto.

“Maurizio siguió adelante por el amplio canal. Ante ellos apareció de repente el famoso puente Rialto, indicándoles que habían recorrido ya la mitad del camino hasta la plaza de San Marcos. Cuando estaban a punto de pasar por debajo, Langdon levantó la mirada y vio una figura solitaria que permanecía inmóvil junto a la barandilla, mirándoles con expresión sombría. La cara era familiar y aterradora. Langdon se sobresaltó”.

Máscara de la peste.

“Tenía unos frios ojos, muertos, y una larga nariz picuda…Langdon cayó en la cuenta que no era mas que un turista luciendo una compra reciente: una de las muchas máscaras de la peste que se vendían en el mercadillo. Ese día, sin embargo, el disfraz le pareción cualquier cosa salvo encantador”.

Luego de un rápido recorrido por el Gran Canal, Langdon y sus acompañantes se acercan a la Plaza de San Marcos, sitio en el cual se desarrollará la totalidad de la historia del Inferno en la ciudad de Venecia, que luego continuará en Turquia.

“Langdon levantó la mirada y vio un pequeño parque que había en la orilla. Por encima de los árboles, silueteado por un cielo sin nubes, se elevaba el campanario de ladrillo rojo de la basílica de San Marcos, coronado por un arcángel Gabriel dorado, y que llegaba hasta unos mareantes noventa metros de altura… el elevado Campanile di San Marco servía de faro de navegación para todos aquellos que se aventuraban por el laberinto de canales de la ciudad”.

Campanile di San Marco.

“Ese día, el espacio estaba ocupado, como siempre, por no menos de cien góndolas negras que se balanceaban en sus amarres. Sus arqueados ornamentos metálicos subían y bajaban ante los edificios de mármol blanco de la piazza”.

Extremo sur de Piazza di San Marcos

Al desenbarcar en la Plaza de San Marcos, Langdon no podía dejar de admirar la increible arquitectura y todas las historias que se tejen detrás de ella.

“Años después, a Langdon le horrorizó enterarse de que el puente de los suspiros no debía su nombre a los suspiros de la pasión…, sino a los de la desdicha. Al parecer, el pasadizo conectaba al Palacio Ducal y la prisión de la Inquisición, donde los encarcelados languidecían y morían, y cuyos gemidos de angustia resonaban en el estrecho canal”.

Puente de los Suspiros

“Mientras seguía avanzando hacia el codo de la plaza, Langdon pudo ver a lo lejos el reloj astronómico de la Torre dell’Orologio de San Marcos; el mismo a través del cual James Bond arrojaba a un villano en la película Moonraker”.

Reloj astronómico de la Torre dell’Orologio de San Marcos

Las pistas que Langdon perseguía desde Florencia, lo trajeron hasta Venecia, particularmente hasta la Basílica de San Marcos.

“Los cuatro caballos de cobre habían sido fundidos en el siglo IV por un desconocido escultor griego de la isla de Chios, donde permanecieron hasta que Teodosio II se los llevó a Constantinopla y los colocó en le hipódromo. Cuando las fuerzas venecianas saquearon la ciudad durante la Cuarta Cruzada, el dux pidió que las cuatro preciadas estatuas fueron transportadas en barco hasta Venecia… Más de medio milenio después, en 1797, Napoleón conquistó Venecia y se llevó los caballos consigo. Una vez en París, fueron colocados en los alto del Arco del Tirunfo. Finalmente en 1815, tras la derrota de Napoleón en Waterloo y su posterior destierro, los caballos fueron enviados de vuelta a Venecia”.

Caballos de San Marcos

“<El mismo aire parece estar hecho de oro>… Robert Langdon había visitado muchas catedrales majestuosas en su vida, pero la atmósfera de la Chiesa d’Oro de San Marcos siempre le había parecido singular. Durante siglos se había dicho que sólo con respirar el aire de su interior uno se volvia mas rico”.

Chiesa d’Oro. Basílica de San Marcos

Luego de adentrarse en una Cripta de la Basílica de San Marcos, Langdon y Sienna intentaron escabullirse de sus perseguidores, abriendo una pequeña ventana que conectaba con la Piazza di San Marcos, donde un gitana les brindó su ayuda a cambio de 2oo euros. Solo Sienna logro escapar mientras Langdon era detenido por unos soldados vestidos de negro que lo reducirian facilmente y terminarian llevandolo al Mendacium.

En este punto, la historia cambia de país, pero nosotros nos detenemos aquí, así que ya tenemos un nuevo viaje pendiente, Estambul, la antigua Constantinopla en la actual Turquia.

Sin lugar a dudas, el Inferno de Dan Brown más que un libro de aventura, lo podríamos catalogar como una excelente guía turistica de Florencia, Venecia y seguramente lo será de Estambul cuando lo visitemos.