Hay ocasiones en las que, como suele decirse, las emociones están tan a flor de piel que no es necesario añadir nada más. Y cuando se añade, esos sentimientos se desbordan sin remedio y lo anegan todo. Esto fue exactamente lo que ocurrió el pasado viernes 9 de abril en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid, cuando y donde un mismo escalofrío recorrió la espalda de más de 10 000 personas.
A escasas semanas de cumplirse el primer aniversario de la muerte de Antonio Vega, su hermano Carlos y su primo —y compañero en Nacha Pop— Nacho García Vega quisieron rendirle un homenaje acorde con la grandeza de su legado en la música española. Para ello organizaron un festival en el que quisieron contar con la colaboración de los amigos del desaparecido músico, y cuyos beneficios fueron repartidos entre Intermón, la Fundación Antonio Vega y diversas Escuelas de Nicaragua con las que él mismo cooperó.
Amigos y compañeros unidos por y para una misma persona (foto: MARÍA MARTÍN)
Más de una veintena de artistas se unieron así, bajo el lema “¡Viva Antonio!“, para dar forma a un tributo con el que recordar a todo el mundo cómo no son pocos los que jamás olvidarán al madrileño. Y como fueron tantas las actuaciones que tuvieron cabida durante las cerca de tres horas que duró el concierto, hablaremos de algunas y terminaremos nombrando a todas mediante el listado que se repartió entre los medios acreditados.
En torno a las 22:19 horas, minuto arriba, segundo abajo, y tras ver unas imágenes de Antonio en las ocho pantallas que guardan el escenario, la banda, su banda, la que tantos momentos compartió con él, interpreta La última montaña. Pero la gran mayoría de los allí presentes no descubre semejante detalle hasta que no lo desvela el primer invitado de la noche, y a buen seguro el menos conocido por sus dotes musicales.
El Gran Wyoming fue el encargado de presentar a cada uno de los músicos que acompañarían al elenco de estrellas a lo largo de la velada, presentaciones de las que sólo he logrado retener la del batería, “la promesa de los pedales después de Indurain”, el parecido físico del teclista con Ringo Starr, y que Wyoming no sólo emplea el “bien, amigos” para presentar programas de televisión. Aparte de estas notas cómicas, lo que viene a continuación, interpretar Antes que salga el sol con guitarra incluida, se lo toma en serio; casi tanto como el hombre que le grita “¡farsante!” entre las primeras filas de la pista.
Banda La última montaña
El Gran Wyoming Antes que salga el sol
Pau Dones Háblame a los ojos
Germán Coppini Enganchado a una señal de bus
Mamá Persiguiendo Sombras
Cómplices Una décima de segundo
Nacho Campillo Desordenada habitación
Burning Relojes en la oscuridad
Cristina Narea Hablando de ellos
Nacho Béjar Mis dos amigos
Shuarma Océano de fuego
Aurora Beltrán Ángel de Orión
La Unión Lo que tú y yo sabemos
Coti Cada uno su razón
Paco Cifuentes y Andrés Suárez Anatomía de una ola
Rosario El sitio de mi recreo
Quique González Con tal de regresar
Coque Malla Seda y hierro
Carlos Tarque A medio camino
Miguel Ríos Tesoros
Carlos Vega Lucha de gigantes
Ketama Se dejaba llevar por ti
Manolo García Esperando nada
Enrique Morente Ángel Caído