Hoy, el estudio de arquitectura A-cero, quiere mostraros una vivienda ejecutada años atrás (2003), ubicada en el municipio madrileño Hoyo de Manzanares, situado en la vertiente sur de la sierra de Guadarrama. Su planta, con forma de polígono irregular se sitúa sobre una parcela de 1.000m2 aproximadamente, lindando con la vía de acceso y con otras propiedades a ambos lados. Su orientación es de Sureste-Noroeste con vistas hacia el jardín y la piscina de la propiedad. En esta vivienda solo se realizó por parte del estudio el proyecto básico, el proyecto de ejecución y la dirección de obra corrió a cargo de otros, por ello se desvirtuaron algunos elementos como las carpinterías exteriores, o la volumetría como se observa en los alzados, perdiendo vuelos, simplificando materiales, y eliminando laminas de madera. Aún así, os mostramos una vivienda con muy buena base, con un coste razonable en relación calidad-precio final.
SECCIONES
ALZADOS
La vivienda consta de tres plantas, diferenciadas por su uso y conectadas entre los distintos niveles por una escalera interior de dos tramos, el ultimo de ellos con peldañeado volado. Situado en un nivel inferior se distribuyen los cuartos de instalaciones y garaje; que recibe luz directa y ventilación desde el exterior mediante un patio interior.
PLANTA SÓTANO
PLANTA BAJA
En la cota de acceso se sitúa la planta baja, que distribuye las zonas más públicas de la vivienda; entrada, aseo, cocina, comedor y una doble altura sobre el salón. Todas las estancias están orientadas a las vistas del jardín.
PLANTA ALTA
En la planta alta encontramos el dormitorio principal, cuarto de baño, despacho y un dormitorio de invitados con su baño. De igual forma que en la planta baja, las estancias están orientadas hacia las vistas del jardín.
EXTERIORES
El programa para este proyecto planteaba una edificación destinada a residencia habitual, sin obviar el entorno en que se sitúa; ambas ideas marcan la distribución de los espacios interiores y el empleo de los materiales. De estas conclusiones nacen dos volúmenes rectangulares maclados longitudinalmente, formando la volumetría de la vivienda y en la que interviene la piscina exterior: alargada, situada paralela a la edificación y que completa el juego volumétrico del inmueble.
INTERIORES
En el espacio interior se buscaba una distribución sencilla y funcional. Aquí tenéis algunas de las estancias principales de la vivienda. En sintonía con los exteriores, en el interior continuamos con la misma dinámica de colores puros y acabados naturales. En toda la vivienda el acabado del suelo es mármol travertino romano, conservando las paredes y techos acabados en pintura color blanco.
SALÓN
COMEDOR
La claridad del esquema exterior se traslada al interior donde dominan los espacios amplios y diáfanos con un interiorismo eminentemente blanco.
COCINA
Amplios ventanales unen exterior e interior rentabilizando al máximo la luz natural.
DORMITORIO
ESCALERA
BAÑO
Con este proyecto, A-cero se reafirmaba en la búsqueda del detalle de igual modo que en la pureza de formas y espacios.