Vivir bien la vida - J. K. Rowling

LOS BENEFICIOS INESPERADOS DEL FRACASO Y LA IMPORTANCIA DE LA IMAGINACIÓN

Vivir bien la vida no es el libro más conocido de J. K. Rowling, la autora de Harry Potter. De hecho, pasó prácticamente desapercibido cuando fue publicado en 2015. No obstante, el texto que contiene, por inspirador podría ser uno de los más valiosos de su trayectoria. Sin duda, el más personal y sincero. No es una novela, ni fue escrito para ser un libro. Es el discurso que ofreció en la ceremonia de graduación de la promoción de 2008 de la universidad de Harvard.
Antes que ella personalidades como Bill Gates y Oprah Winfrey también fueron invitados a dar sus discursos en la universidad más antigua de Estados Unidos.  Para elaborar el suyo Rowling reflexionó sobre qué le habría gustado saber en su ceremonia de graduación, y qué lecciones había aprendido en los veintiún años que habían transcurrido entre aquél día y ese momento. Así, en su discurso habló de dos cuestiones: los beneficios de fracasar y la importancia de la imaginación.
J. K. Rowling reflexiona sobre las virtudes del fracaso a través de sus propias vivencias. La dedicación a la escritura llegó en un momento de su vida en el que lo había perdido todo. Confiesa que llegó a rozar la pobreza. Cuando se graduó su mayor temor era fracasar, pero cuando eso sucedió se sintió liberada. Seguía viva, «y tenía una máquina de escribir vieja y una gran idea. Y así fue como, tras tocar fondo, ese mismo fondo se convirtió en la sólida base sobre la que rehíce mi vida».
El fracaso le llevó a la escritura. Si hubiera tenido cierto éxito en cualquier otro medio, posiblemente, no habría encontrado la determinación ni el momento para emplearse en ello.
«El fracaso me obligó a prescindir de lo superfluo. Dejé de fingir ante mi misma que era lo que no era y empecé a concentrar toda mi energía en acabar el único trabajo que de verdad me importaba».
Cuando era joven, a sus padres su imaginación les parecía una divertida excentricidad que no le pagaría la hipoteca. Sin embargo, la imaginación sí que le ha pagado la hipoteca y mucho más, en vista del enorme éxito que ha cosechado con Harry Potter y que continúa dandole frutos. Pero en este discurso aborda la imaginación desde una perspectiva distinta al concepto de concebir algo que no existe o el hecho de idear historia. La imaginación como la capacidad de empatizar con otros seres humanos con circunstancias completamente distintas a la nuestra. Ponerse, imaginarse, en la piel del otro. Las personas podemos entender algo sin necesidad de haberlo experimentado.
En este episodio revela una de las experiencias que marcaron su vida. Haber trabajado en Amnistía Internacional, en el departamento de investigaciones africanas, le hizo conocedora de historias de sufrimiento atrozes. Descubrió la peor parte del ser humano, pero también la de aquellos que son capaces de empatizar y ayudar al prójimo.

«Si conserváis la capacidad de imaginar que vivís la vida de quienes no gozan de nuestros privilegios, vuestras orgullosas familias no serán las únicas que se alegrarán de vuestra existencia, sino también miles y millones de personas cuya realidad habréis contribuido a cambiar. No necesitamos magia para transformar nuestro mundo, ya tenemos, en nuestro interior, todo el poder que necesitamos: el poder de imaginar algo mejor».

Combinando el humor con la solemnidad del discurso, J. K. Rowling ha creado un texto de una sinceridad y verdad que capta al oyente y lector, y profundamente inspirador. Un discurso que defiende el valor de la imaginación y que invita a actuar, a arriesgarse, a pesar del fracaso. Pues tan valioso es el éxito, como la valentía para afrontar el fracaso.
VIVIR BIEN LA VIDAJ. K. RowlingSalamandra, 201876 Págs.Very Good Lives. The fringe benefits of failure and the importance of imagination[Traducción: Gemma Rovira Ortega]