Cuanto más hablemos y más nos quejemos de una situación, peor se verá, hasta que el problema se vuelva más grande que nuestra fe. Y a la inversa,Vivir Por Encima De Las Circustancias y llevar los problemas directamente a Dios mantiene a las cosas en perspectiva. El Señor es más grande que cualquier dificultad. Por su poder, nos elevamos por encima de la dificultad.
Dios nos invita a vivir por encima de las circunstancias, fijando nuestra mirada en Él. Las pruebas de esta vida se hacen pequeñas en comparación con nuestro misericordioso y poderoso Señor, quien ejerce su poder en defensa de su pueblo. Vivir Por Encima De Las Circustancias, porque el enfocarse en Dios le permitía vivir por encima de sus circunstancias (Fil 4.8).