Ésta es la primera vez que una empresa de telefonía móvil recibe una demanda previamente adjudicada por el juzgado en el que se le denuncia por los supuestos cobros indebidos que han realizado durante años por la liberación de terminales móviles a sus clientes.
Esta demanda es colectiva y ha pasado a trámite en el Juzgado de lo Mercantil número 1 de A Coruña.
Realmente es increíble cómo parece que la justicia está últimamente aprentando las “tuercas” a las grandes compañías, tanto es así que esto nos es más que una nueva vía para que todo tipo de asociaciones y particulares se sumen a la denuncia de ejercer sus derechos de cesación, devolución de importes indebidamente cobrados así como una indemnización por daños y perjuicios.
Y es que esta práctica que por otro lado era tan habitual por parte de las compañías móviles se han terminado calificando por la Comisión de Cooperación de Consumo como abusivas al poder bloquear el terminal e inhabilitarlo con otras compañías operadoras.
Si nos adentramos en su origen, éste se remonta al momento en que dicha empresa absorbió a Airtel durante el 2011 y cobró indebidamente a sus clientes cantidades de dinero por liberar los teléfonos móviles que procedían de contratos de clientes de Airte. Esta cantidad era de casi 10 euros por la proporción de un código de desbloqueo que era el necesario para poder utilizar entonces el terminal.
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