
đŸ“� Este artĂculo parte de un precioso reportaje publicado en Revista Interiores, protagonizado por un proyecto muy especial del Estudio Leticia SaĂĄ, con la colaboraciĂłn de la constructora Ekan. Las imĂĄgenes, que transmiten con delicadeza la esencia cĂĄlida y serena de este hogar en la Sierra de Madrid, son obra del fotĂłgrafo Amador Toril, con estilismo de Cristina RodrĂguez Goitia. Yo solo pongo voz a lo que me emociona y lo comparto con cariĂąo, como quien enseĂąa un tesoro decorativo a una amiga. đŸ’Ť
Hay casas que son mucho mĂĄs que ladrillos, ventanas y tejados. Casas que guardan risas de infancia, veranos eternos, meriendas de pan con chocolate y noches de estrellas en el porche. Esta historia comienza asĂ: con una casa de verano familiar, una pérdida profunda… y un regreso lleno de intenciĂłn.
La protagonista es una joven médico que, tras el fallecimiento de sus padres, decidiĂł comprar las partes de sus hermanos y recuperar ese rincĂłn de la Sierra de Madrid donde habĂa sido feliz. ¿Su idea? Transformarlo en su hogar definitivo. No una reforma sin mĂĄs, sino una resignificaciĂłn emocional. Y para eso, confiĂł en el Estudio Leticia SaĂĄ, que entendiĂł desde el minuto uno que este proyecto iba mĂĄs allĂĄ del diseĂąo.
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Un hogar que guarda memoria
Desde el primer encuentro, Leticia conectĂł con la sensibilidad de la propietaria: su amor por el arte, su deseo de vivir en calma, su claridad de ideas. Todo fluyĂł, como debe ser cuando se trabaja desde la verdad.La casa —en colaboraciĂłn con la constructora Ekan— se repensĂł con mimo y respeto. Uno de los grandes retos fue conservar la estructura original, como la cubierta de madera, que ahora queda vista y aporta un gesto escultural que invita a mirar hacia arriba. También se reubicaron los espacios para adaptar la vida al presente: el antiguo trastero se transformĂł en una cocina luminosa y prĂĄctica, abierta al jardĂn, pensada para disfrutar los dĂas largos del verano con la puerta abierta y los pies descalzos.




Materiales nobles, diseĂąo consciente
Todo el interiorismo gira en torno a la idea de serenidad y conexiĂłn con el entorno. Madera de roble, ratĂĄn, baldosas reutilizadas, microcemento… Texturas que suman sin hacer ruido, en una paleta suave con algĂşn que otro destello (ojo al azul agua de los cojines de Lizzo que aparece por ahĂ como quien no quiere la cosa… y se te queda en la retina).Se nota la intenciĂłn de crear un hogar donde todo tenga sentido. No hay elementos puestos por poner, sino una bĂşsqueda clara de armonĂa, funcionalidad y belleza. Todo habla el mismo idioma: el de la calma bien diseĂąada.
Detalles que enamoran
PodrĂa hacer una lista infinita, pero me quedo con estos:- Las butacas de Kave Home que enmarcan el salĂłn con un aire entre rĂşstico y escandinavo.
- Las obras de David Cantero y Alejandra MuĂąoz Duarte, que aportan fuerza silenciosa en los muros.
- Las cerĂĄmicas de La NavĂĄ y los arreglos florales de Guguiarte, pequeĂąas joyas artesanas que suman delicadeza.
- El comedor, con sillas ligeras y mantel de lino, que invita a sobremesas largas y conversaciones sin reloj.




Un refugio con vocaciĂłn de eternidad
Dice Leticia SaĂĄ: “Un hogar no solo debe ser estéticamente atractivo, sino también un refugio en el que vivir plenamente”. Y esta casa lo es. Conserva su alma rĂşstica, pero ha ganado funcionalidad, eficiencia energética y belleza atemporal.No hay estridencias. Hay calma, respeto por la historia y una sensibilidad que se palpa en cada decisiĂłn.
En definitiva, una casa que ha vuelto a ser hogar. Que honra su pasado y abraza su futuro. Que emociona, inspira y nos recuerda que el diseĂąo, cuando estĂĄ bien hecho, tiene el poder de sanar.
¿Verdad que esta casa invita a bajar revoluciones y soĂąar con una vida mĂĄs pausada entre ĂĄrboles y recuerdos? đŸ˜� Te leo encantada en los comentarios… ¡y mil gracias por pasarte por aquĂ!
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đŸ“� Este artĂculo parte de un precioso reportaje publicado en Revista Interiores, protagonizado por un proyecto muy especial del Estudio Leticia SaĂĄ, con la colaboraciĂłn de la constructora Ekan. Las imĂĄgenes, que transmiten con delicadeza la esencia cĂĄlida y serena de este hogar en la Sierra de Madrid, son obra del fotĂłgrafo Amador Toril, con estilismo de Cristina RodrĂguez Goitia. Yo solo pongo voz a lo que me emociona y lo comparto con cariĂąo, como quien enseĂąa un tesoro decorativo a una amiga. đŸ’Ť
Este post ha sido redactado segĂşn el CĂłdigo de Confianza C0C.
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