Revista Opinión

Volver al Fondo

Publicado el 15 abril 2014 por Gsnotaftershave @GSnotaftershave

Después de años de discurso anti-monetario y un pasado turbulento con el organismo, Argentina volvió al FMI.

La Asamblea de Primavera del FMI y el Banco Mundial terminó este sábado en Washington y dejó mucho para hablar en Argentina.

El ministro de Economía argentino, Axel Kicillof.

El ministro de Economía argentino, Axel Kicillof.

Primero porque es la primera vez que el país va con una presunción de intenciones de volver a captar deuda, desde el famoso default (cesación de pagos) del 2001. Segundo porque hace menos de una semana el FMI entregó un informe lapidario sobre la situación económica del país. Y tercero, porque el convocado a la cita fue Axel Kicillof.

Al actual ministro de Economía del kirchnerismo, le costó cara la visita: no faltaron los medios que lo criticaran, de derecha y de izquierda.

Muchos le dieron porque antes sostenía postura más cercana al “pibe trosko” que a un ministro de Economía al respecto del FMI, y ahora, como representante argentino, concurrió a la cita marcada por Christine Lagarde.

Otros, al mejor estilo Fashion Police, le hicieron críticas por el tipo de vestimenta que llevó al encuentro: era el único sin corbata.

Y el ministro tomó nota.  “Si no asistía iba a ser un escándalo y si asistía iba a ser otro escándalo”, se defendió Kicillof, encerrado en un dilema.

En sus declaraciones también trató de diluir las expectativas al respecto de una posible toma de deuda del país. “No tenemos ningún tipo de acuerdo porque de hecho el Fondo no es acreedor de Argentina. Desde 2006 no tenemos ni deuda con el fondo ni programa consensuado o impuesto en lo que respecta a política económica”, aclaró el ministro.

Pero Argentina está poniendo los patitos en fila y muchos especulan que esto responde a una nueva necesidad de crédito.

Negociaciones con el Club de París, un nuevo IPC a pedido del FMI, el blanqueamiento del tipo de cambio oficial y la quita de subsidios al gas y la electricidad son algunas de las medidas que marcan el giro económico que el gobierno de Cristina Fernández está dando.

El ministro aseguró que se puede negociar con el FMI y dejó claro que Argentina seguirá sin aceptar las revisiones anuales del Fondo. Pero no sería la primera vez que el organismo tiende una mano al país, para después dejarlo caer en un momento clave.

Basta con ver el archivo del supuesto “blindaje” que el FMI propuso al gobierno de Fernando De la Rúa, un parche para evitar el default que finalmente no sirvió y desembocó en la Crisis de 2001, el peor momento en la historia reciente del país. El video es tristemente cómico. Irónico.

Devaluación y tarifazo. Préstamos del FMI. Suena conocido. Espero que la historia de amor-odio con el FMI tome una vía un poco más madura esta vez. Veremos si somos capaces.


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