Me considero de derechas, de una derecha civilizada, que no existe en este país y que no solo no es el PP, sino que en muchos aspectos es lo opuesto al PP, pero si fuese griego habría votado por Siriza sin dudarlo un instante.
Todo y el populismo de Siriza y su consecuencia, que también padece Podemos, que es su poca concreción, porque hablan mucho de lo que van a hacer pero muy poco o nada de cómo lo van a hacer, cuestión crucial teniendo en cuenta que con alguno de sus objetivos, dependiendo de cómo lo intenten, el remedio puede ser peor que la enfermedad, a pesar de todo habría votado Siriza porque incluso siendo una incógnita, la alternativa, es decir continuar con las medidas estúpidas, es tan rematadamente desastrosa que en este caso es mucho mejor listo por conocer que tonto conocido.
Con los rebuznos desde Bruselas y Berlín de estos días, he llegado a la conclusión que la estupidez europea ha llegado a tal extremo de profundidad que incluso afecta al idioma, con expresiones no solo incorrectas sino engañosas, sobre todo en dos casos:
Hablan de reformas, afirman que las reformas efectuadas no son suficientes y se ha de seguir con las reformas. ¿Qué reformas?, ¿a qué reformas ya efectuadas se refieren?, recortar y subir los impuestos no es reformar, en este caso solo ha sido hacer el idiota. Reformar es modificar la manera en que se hacen las cosas, y de esto ha habido muy poco en las medidas estúpidas. En España tenemos dos ejemplos paradigmáticos, la reforma de la lucha contra la corrupción y la reforma de nuestra catastrófica Administración Pública, dos reformas no solo urgentes sino que mejorarían enormemente el país desde todos los puntos de vista, económico, político, social, etc., las primeras reformas que se debían haber puesto en marcha, y que ya está claro que van a quedar en nada. ¿Alguien ha oído alguna vez a Merkel y sus tontitos referirse a ellas, o ha visto a nuestros gobiernos de cualquier color hacer algo más que aparentar que están haciendo algo?. Y en Grecia una buena reforma hubiese sido perseguir la inmensa defraudación fiscal de las grandes fortunas, sin la que probablemente no habría necesidad de rescates.
Y también se refieren a la austeridad cuando hablan de las medidas estúpidas. ¿Qué austeridad?. Austeridad no es solo pegarle palos a la ciudadanía. Austeridad habría sido entrar a saco en la Banca y acabar con sueldos galácticos de personajes que se han cargado la institución que dirigen y las finanzas del país, y haber mandado a más de uno a pasar una larga temporada en la cárcel, cosa que Merkel no solo tampoco ha hecho sino que ha protegido a sus banqueros de las revisiones bancarias de la U.E. Austeridad habría sido suprimir los miles de funcionarios de alto nivel y sueldo que sin ellos la Administración funcionaría mucho mejor, y hacer lo mismo con el Senado, también habría sido austeridad suprimir realmente y no solo aparentemente obstáculos, trámites, gestiones y procedimientos absurdos e inútiles a las empresas, empresarios y ciudadanos, controlar y reducir al mínimo indispensable los viajes de políticos y personajes públicos, y un largo etc.
Lo que Merkel, la U.E. y el FMI nos han impuesto desde el 2010, en especial a Grecia, pero también a los demás, es una descomunal burrada que ha empeorado nuestro problema en vez de solucionarlo, con el agravante de que muchos anticipamos desde el primer día lo que iba a pasar, la bronca de los que estamos en contra no ha parado de aumentar, y no hay economista, desde los keynesianos a los ultraliberales, pasando por todos los estadios intermedios, que tarde o temprano y de forma clara o velada no lo hayan calificado de burrada.
La U.E, dispone de excelentes equipos técnicos en todos los temas, cuya opinión, como siempre, no ha contado para nada, y se ha hecho lo que quería la Loca de Berlín. Estos equipos técnicos podían haber sido de gran utilidad para establecer planes detallados individualizados por país, especialmente en los casos más problemáticos, en vez del maldito café para todos que ha destrozado más que reparado.
Las críticas han sido múltiples y variadas, pero en mi opinión lo peor ha sido en primer lugar centrar las medidas estúpidas solo en lo que ellos llaman austeridad, que en realidad es solo dar palos a la ciudadanía. La austeridad, la de verdad, es imprescindible, pero basarse solo en recortes de servicios y aumentos de impuestos para solucionar un problema de crisis, sin otra consideración económica de ningún tipo es de verdadero retrasado mental. A esto se añade que en la U.E. se estableció el límite al déficit presupuestario en el peor momento, cuando estábamos saliendo de la primera fase de la crisis, como si el objetivo fundamental de la U.E. fuese limitar los presupuestos y no salir de la crisis cuanto antes, y finalmente no se tuvo en cuenta que los recortes en plena crisis provocarían recesión que a su vez redujo en mucho los ingresos del Estado lo que obligó a recurrir a la Deuda, que en muchos países ha alcanzado niveles impagables.
Aunque el destrozo provocado por las medidas estúpidas ha sido general y ha alcanzado a la propia Alemania, los resultados han sido especialmente negativos para España. Cuando en el 2007 se inicia la crisis el PIB per cápita de España estaba en 23.500 €, cuando en el 2010 se imponen las medidas estúpidas era de 22.800 € per cápita, y en el 2014 se sitúa en 22.400 € con un ligero aumento de 100 € sobre el 2013. La tasa de paro estaba por debajo del 10% en 2007, cuando Merkel impone la burrada está ya cerca del 15% y hoy está en el 24% donde ha descendido lentamente desde el 26%, y para acabar, la Deuda pública estaba solo en el 62% del PIB cuando Merkel dictó las ordenes en 2010, y hoy día está sobre el 100%. Porque a Merkel, la U.E. y el FMI les ha dado la gana, para obtener estos fantásticos resultados nos hemos tenido que apretar el cinturón como nunca lo habíamos hecho y muchos de nuestros conciudadanos han caído en la miseria. Empeorad mucho esta descripción, y tendréis el panorama de Grecia.
Muchas veces me he planteado como es posible que gente tan importante sea en realidad tan burra. Empezando por el FMI, que lleva décadas aplicando siempre las mismas medidas tradicionales que han hundido país tras país, y que se mantienen a pesar de que ya en enero 2013 Olivier Blanchard, economista jefe del FMI reconoció que en Europa sus medidas han fracasado, pero solo hace unos días y en relación precisamente con Siriza insistía en que deben mantenerse, ¿será sado-masoquismo?. La U.E. no necesita razón alguna para tomar una decisión o hacer algo estúpido y/o absurdo, lo hacen cada día. En cuanto a Merkel, ya he dicho varias veces que en mi opinión la razón es tan increíble como que esas medidas fueron las que permitieron a Alemania superar con éxito el elevado exceso de Deuda Pública provocado por la reunificación, y ahora las imponen a toda Europa sin querer oír a la multitud que dice que en un periodo de tiempo mucho más corto y con la economía en situación de crisis el resultado de su aplicación es desastroso. Para completar mi opinión sobre las razones alemanas, voy a añadir dos comentarios, en primer lugar que para Frau Merkel es muchísimo más importante solucionar los problemas de los bancos alemanes que evitar que uno de esos países del sur se vaya al infierno, y también que si los más guapos, altos, inteligentes, atléticos y rubios de toda Europa tuvieron que sacrificarse, también deben hacerlo los irresponsables del sur, aunque sus sacrificios no sirvan para nada, por haberse atrevido a causar problemas a los bancos alemanes. Suena a ciencia ficción, pero desgraciadamente estoy convencido de que no lo es.
Para mí las conclusiones están muy claras:
Nos hemos estando sacrificando no solo para nada, sino para ir a peor, para alargar y profundizar la crisis, de la que estamos saliendo de manera frágil y poco clara.
Para saber si un país europeo ha tenido éxito en superar la crisis basta con comprobar si es miembro de la U.E., si lo es va mal y está saliendo de la crisis a trompicones y de mala manera, si no lo es ya ha superado claramente la crisis hace tiempo. No falla.
Todos esos señores/as muy importantes que continuamente nos advierten sobre los inmensos peligros que suponen partidos como Siriza o Podemos son los verdaderos y casi únicos responsables de que hayan aparecido y de su éxito, y en vez de rebuznar deberían al menos intentar solucionar REALMENTE los problemas.