"La voz del pueblo es la voz de Dios". Pues el juego no tiene nada que ver.
En Vox Populi nos metemos en la piel de alguien parecido a un ninja a quien informan de que la chica que le rompió el corazón ha sido raptada por licántropos. Así pues, dejamos de hacer flexiones y nos ponemos inmediatamente en marcha, destripando a todo bicho viviente que se nos pone por delante. Y es que el protagonista no se privará de mancharse de sangre si es necesario para llegar a la celda donde han retenido al desamor de nuestra vida y poder escapar con ella.Así pues, combinando la ultraviolencia (podremos abalanzarnos sobre los enemigos y abrirles las tripas con solo pulsar una tecla) y el sigilo (podemos hacernos invisibles) tendremos que superar unas cuantas fases de plataformas. Y decimos unas cuantas porque el juego no es largo, ni difícil, dicho sea de paso.
Los gráficos son sencillos pero tienen una estética bastante llamativa, y tanto los personajes como los escenarios están muy bien hechos. Para consistir en cuatro píxeles, claro. Además, la sangre es todo lo roja que cabría esperar, y al menos nadie se quejará de escasez. Por lo que respecta al sonido, los lamentos de nuestras presas moribundas funcionan bien, y aunque mientras se está jugando no se echa de menos, algo de música no le hubiera sentado mal.
Una propuesta directa y rápida (se juega online), una buena combinación entre acción e infiltración muy recomendable.
Link a Vox Populi, Vox Dei.
Si está pixelado no es violento.