Este articulo lo escribo como réplica a uno que bajo el titulo “VOX Y Podemos. Se parecen como un cerdo a un freno”, ha publicado un tal/o una tal FRABED (supongo “que un tal” y que el “FRA” debe de referirse a “Francisco”, así es que me referiré a “este señor”).
En primer lugar quiero dejar claro que no me dirijo al señor FRABED, autor del artículo, porque doy por supuesto que cuenta en él las mentiras que cuenta a sabiendas que lo que cuenta son mentiras, sino que me dirijo a todas aquellas personas que hayan podido leer ese artículo suyo; si así no fuera, el asunto sería mucho más grave para él, porque demuestra una ignorancia supina.
Este señor habla de “…una España tísica y escuálida de posguerra que para alimentarse comía peladura de patatas…”. Y a este respecto yo tengo que decir lo siguiente: sí, efectivamente, en la España de posguerra se pasó hambre, como es normal que suceda en todas las posguerras; no sé de ningún sitio en el que, después de una guerra, la gente hubiera ido a comer a restaurantes de lujo. Normalmente, después de una guerra, los países quedan devastados como consecuencia de los bombardeos por parte de la artillería y de la aviación de los dos bandos enfrentados y si se ha tratado de una guerra civil en la que el escenario ha sido un único país, pues con razón de más para que ese país haya quedado en ruinas y se haya pasado hambre; y si hubiera ganado el bando republicano, hubiera pasado lo mismo.
Pero luego este señor habla de “una España que…hacía gala de su incultura”. A este respecto yo tengo que decirle a los lectores de este señor que hubo tres intelectuales que fueron denominados “padres intelectuales de la república”, pues ya durante la monarquía, durante el reinado del rey Alfonso XIII, se erigieron en convencidos defensores de esa forma de Estado, que fueron Gregorio Marañón, José Ortega y Gasset y Ramón Pérez de Ayala. Y, como digo, los tres realizaron encendidas defensas de la república y colaboraron con ella en un principio…hasta que se desilusionaron; hasta que se dieron cuenta de en qué íba a terminar todo aquello. Y cuando estalló la guerra civil, en Julio de 1936, los tres vivían en Madrid, que estaba bajo control republicano, y los tres huyeron a Francia, temiendo que los republicanos les asesinasen, porque se desató una campaña en contra de los intelectuales. Y no fueron los únicos que salieron huyendo, fueron muchos entre los que puedo citar a Juan Ramón Jimémez, Juan Martínez Ruiz (Azorín), Salvador de Madariaga…y muchos otros.
O sea, que este señor habla de que la España de posguerra fue una España inculta…y quizá tenga razón, pero por culpa del Frente Popular que hizo que todos los intelectuales salieran huyendo, temiendo ser asesinados por las hordas comunistas, anarquistas…
Este señor luego habla de “…esa España de represión, con olor a viejo, a podrido y a triste…”. Y, cuando leí esta frase me vino a la memoria un comentario que leí en Facebook, hace algún tiempo, de alguien que ironizaba sobre esos “jóvenes odiadores”, que no llegan a treinta años y que sienten un odio profundo, e intenso, por Franco y por todo lo que representó el franquismo. El comentario venía a decir algo así como: “ Esta mañana, un joven de veintiocho años me contó lo que fue la Guerra Civil: los bombardeos sobre la población civil; las matanzas de soldados republicanos, indefensos, que se habían rendido; la represión a la que el bando nacional sometía a las zonas ocupadas por ellos…Fue tremendo”.
Y ese comentario me hizo mucha gracia porque viene a representar, perfectamente, lo que sucede en la España actual en la que unos dirigentes a los que les interesa que la población esté dividida, lanzan su discurso; difunde sus ideas que son recogidas por los menos dotados intelectualmente que las hace suyas, sin cuestionarlas, sin verificar si son ciertas o no. Y así es como estos “jóvenes odiadores” resucitan un problema, que les queda muy lejos en el tiempo y que sí resolvieron, con la Transicion, con la aprobación Constitución y con la Ley de Amnistía, personas que sí vivieron aquellos acontecimientos en primera persona. Y así fue como Leopoldo Calvo Sotelo fue capaz de intercambiar impresiones con Santiago Carrillo y Dolores Ibárruri, y no echarles las manos al cuello por haber asesinado a su tío.
Pero estos “jóvenes odiadores” que tienen menos neuronas que un percebe han hecho suyo el mensaje de que “cómo era posible que el dictador reposara, tranquilamente, en su tumba, en el Valle de los Caídos, mientras los restos de míles de españoles se encontraban sepultados en fosas comunes”, con el que empezó un imbécil, además de mala persona, que nadie se explica cómo fue que pudo llegar a la presidencia del Gobierno español, y que tuvo como “méritos”, durante los ocho años que estuvo dirigiendo los destinos de nuestro país: haber arruinado a España, dejándola al borde del rescate global de su economía; haber resucitado el odio entre “las dos Españas”, con su sectaria, y mentirosa, Ley de Memoria Histórica; haber activado el conflicto catalán, habiendo prometido que el Congreso aprobaría el Estatut que el Parlament aprobara; haber arruinado la magnífica política exterior que Aznar había llevado a cabo, aislándonos en Europa y estrechando lazos con Castro, Chávez, Ortega, Correa, Morales…en fin, lo más granado del populismo de izquierdas que está arruinando a Hispanoamérica; haber dado el chivatazo a ETA de que la policía francesa íba a llevar a cabo una operación contra ellos…
Luego, el señor FRABED continúa con su retaíla de mentiras:
“VOX plantea la exclusión del que no es español…” que, supongo que se referirá a la política migratoria de VOX, y digo “supongo”, porque este señor redacta fatal y es difícil seguirle el hilo, hasta el punto de que hay cosas a las que no voy a contestar porque no le entiendo.
Pues referente a este punto he de decir que VOX no se opone a la inmigración, este partido político lo que dice es que es partidario de una inmigración controlada; que los inmigrantes que han seguido el procedimiento que impone la ley sean atendidos en su requerimiento y que aquellos que lo han hecho saltando la valla de Ceuta y Melilla y que han arrojado heces y ácido a los policías que defienden nuestras fronteras, sean devueltos a sus países de origen. Es evidente que no puede tener el mismo trato aquel que cumple con la ley que aquel que no lo hace.
VOX plantea lo que toda persona que tenga “dos dedos de frente” piensa, que el problema hay que resolverlo en origen, ayudando al desarrollo de aquellos países de los que proceden los inmigrantes, pero que acoger a todos los millones de africanos que quieran venirse a Europa no es la solución.
VOX lo que dice es que no hay que colaborar con las mafias del estilo del Open Arms, que se dedican al tráfico de seres humanos y que, encima, son subvencionados por el Gobierno.
VOX lo que dice es que se le dé prioridad a la inmigración de los países hispanoamericanos, con los que nos unen un pasado común y unos lazos culturales comunes, por delante de la inmigración procedente de África, con la que poco tenemos en común.
VOX lo que pide en este punto es lo que pide siempre: que se cumpla la ley.
“VOX plantea que las mujeres vuelvan a la cocina, a la casa, a criar a la prole y a coser botones…”. A este respecto tengo que decir que las dos mujeres más “visibles” dentro de VOX, que son Rocío Monasterio y Macarena Olona, son arquitecta y abogada del Estado respectivamente, y que las dos desempeñan sus profesiones, o sea que no creo que estas dos mujeres sean el paradigma de ese tipo de mujer sumisa, dependiente y recluida en su casa cuidando a la prole, de la que el señor FRABED habla.
Referente a lo de “coser botones” he de aclarar que eso lo dijo una política de VOX, no recuerdo de qué sitio, que ironizó sobre el hecho de que “coser botones empodera mucho”, cosa que los voceros de izquierda han aprovechado, de inmediato, para sacarla de contexto y utilizarla como arma arrojadiza contra VOX, al igual que sucedió con un comentario que hizo Santiago Abascal, en una rueda de prensa con motivo del anuncio del pacto de Gobierno PSOE/Unidas Podemos, en el que parodió unas declaraciones realizadas por Pedro Sánchez, cuando este se oponía a pactar con Podemos, aduciendo que “con Unidas Podemos en un Gobierno se volverían a las cartillas de racionamiento”; Abascal, que de tonto no tiene un pelo, se anticipó al futuro y dijo “ya le he dado el titular a la Sexta” y, efectivamente, Antonio Martín Ferreras cayó, “como un pardillo” en la trampa y le faltó tiempo para decir “ha dicho Santiago Abascal que volveremos a las cartillas de racionamiento”.
Luego dice este señor, el tal FRABED, que “en VOX solo hay un pensamiento único y que ellos representan los toros y la caza”. En este caso tengo que decir que VOX, efectivamente, defiende la pervivencia de los toros y de la caza, por una vez, y sin que sirva de precedente, el señor FRABED ha dicho la verdad (bueno, no completamente, en cuanto a los toros y la caza, no respecto al pensamiento único); y yo, al respecto, tengo que decir que coincido, en casi todo, lo que defiende VOX menos en estos aspectos, porque yo soy antitaurino y me encantan todos los animales, en general, así que estoy también en contra de la caza y, desde luego, de que unos hijos de mala madre que se dicen cazadores, ahorquen a sus perros cuando se termina la temporada de caza; y no solo eso, sino que estoy en contra de que le den la miserable vida que les dan, metiéndolos en zulos durante meses, pero eso es lo único que me une a Podemos mientras que eso es lo único que me separa de VOX. Y somos muchos los que pensamos igual, pero si cada uno queremos un partido que se amolde, por completo, a lo que es nuestro pensamiento, seríamos muchos los que tendríamos que crear nuestro propio partido.
Dice este señor que “VOX cree que todo el mundo debe de ser religioso, creer en Dios y ser cristiano”. Y a este respecto tengo que decir que no, que VOX quiere que continúe la separación Iglesia/Estado y que no piensa conculcar el principio de libertad de pensamiento, tampoco en materia religiosa, así es que el que quiera ser católico, que lo sea; el que quiera ser musulmán, que lo sea; el que quiera ser metodista, que lo sea; el que quiera creer en la cienciología, que crea…y el que quiera no creer en nada, que lo haga.
El señor FRABED, fiel a su “línea editorial”, falsea unas declaraciones de uno de los líderes de VOX. Ante los ataques, por una parte de la comunidad musulmana, que dijo que “les ofendía la exhibición de símbolos religiosos cristianos, en la calle, durante la Semana Santa y Navidad”, un representante de VOX dijo que España es un país de tradición católica y el que venga a este país como inmigrante, en busca de un futuro mejor, tiene que respetar eso y si no le gusta, que se vuelva a su país de origen. Le guste, o no, a Unidas Podemos y al PSOE, eso es un hecho cierto: a día de hoy, España es un país de tradición católica y la mayoría de sus ciudadanos profesamos esta religión; en un futuro, después de la dictadura chavista/estalinista que se nos viene encima, no se sabe.
Y sí, efectivamente, los españoles fuimos emigrantes y muchos españoles migraron a Venezuela, Cuba, Alemania, Suiza…pero todos fueron a trabajar; ninguno fue a vivir de las ayudas de esos Estados, que no se daban, y todos esos emigrantes fueron muy respetuosos con las costumbres de esos países que los acogieron, y muy agradecidos por haberles dado la oportunidad de progresar en la vida; no fueron buscando delinquir; no fueron pensando en violar a sus mujeres porque, como no vestían como en España, para ellos era putas; no fueron pensando en devolverles el favor, colaborando con la destrucción de ese país, integrándose en movimientos separatistas; no fueron queriendo imponer sus ideas y creencias…
El señor FRABED habla de que “Unidas Podemos quiere subir la imposición pero solo a las rentas más altas”, pero no dice nada de la imposición indirecta, no dice nada sobre el IVA, sobre el Impuesto sobre Hidrocarburos…impuestos que no hacen discriminación alguna en función de la renta de los que los pagamos y que, tradicionalmente, la izquierda sube; no dice nada sobre la subida en la cuota que los autónomos deberán de pagar a la Seguridad Social, que piensan subirla hasta los 313 euros (y en eso no establecen comparaciones con el resto de los países de Europa, que tanto gustan de hacer, porque la cuota española es la más elevada, con diferencia, sin contabilizar esta próxima subida).
El señor Frabed no dice nada acerca de que la subida del SMI a los 900 euros ha provocado justo el efecto contrario al pretendido, pues ha tenido consecuencias negativas en la creación de empleo.
El señor FRABED, repitiendo como un lorito las consignas de sus líderes políticos, dice que “la Iglesia no debe de tener ningún privilegio”, porque sus líderes políticos siguen anclados en la decimonónicas ideas alumbradas por Marx de que hay que ir a la “lucha de clases” y de que, en esa “lucha de clases”, el proletariado debe de aniquilar al empresariado; el explotado debe de aniquilar al explotador; los negros deben de aniquilar a los blancos; los pobres a los ricos; las mujeres a los hombres…porque el marxismo es la doctrina del odio mientras que la Iglesia catequiza sobre lo contrario: que debemos de amarnos los unos a los otros.
Es por esto que el comunismo aborrece, odia, al cristianismo y simpatiza con el Islam, porque esta doctrina es intolerante y busca la conversión de todo el mundo a la misma y aquel que no se convierta, será aniquilado.
Y sí, hay motivos para que la Iglesia cuente con privilegios, porque se trata de la ONG más grande que hay; todas las demás ONGs juntas, palidecen ante la Iglesia católica, y a los hechos me remito, pues ella sufraga, en todo el mundo:
-5.393 hospitales.
-16.526 dispensarios médicos.
678 leproserías.
14.430 hogares para ancianos y para minusválidos.
8.968 orfanatos.
11.675 jardínes de infancia.
Y todo ello dirigido a los menos favorecidos, a aquellos que encuentran en la Iglesia a la única tabla de salvación.
Cuando llegan los inmigrantes que, Unidas Podemos dicen querer tanto, los primeros en correr en su ayuda son Cruz Roja y Cáritas Diocesanas y esta última también ayuda a los españoles que no tiene recursos gracias a las políticas socialistas, que se han alternado con las del PP, pero mientras que las de este crean trabajo, las políticas del PSOE lo han destruido.
Me voy a despedir haciéndole una reflexión al señor FRABED: señor FRABED, si usted tiene que recurrir a la mentira para defender sus ideas, quizá ello quiera decir que deba usted de replantearse esas ideas. c