La creatividad es una suerte de fantasía en constante evolución, nunca sabes cuándo aprovechará un niño-a esta fantasía dice Malaguzzi. A los maestros nos gusta acompañar a los niños-as a lugares que van más allá dentro del reino del espíritu creativo, les ofrecemos las herramientas, las palabras, el amor…entre otros valores que sostienen el gozo por la vida y sin duda serán las herramientas para que nuestros niños y niñas se enfrenten mejor a ella.
Mientras exijamos un estrecha franja de desempeño escolar, como rellenar fichas o completar cuadernos de ejercicios es posible que muchos niños-as lleguen a la conclusión que no tienen las capacidades adecuadas para alcanzar estas exigencias escolares y esta conclusiones son una pena, teniendo en cuenta que la escuela es mucho más. Es el lugar donde los niños crecen y debemos darle la oportunidad de que utilicen el cuerpo, los sentidos o la capacidad de trabajar con otros miembros de la escuela utilizando mil formas de expresión. Mientras lo hagamos estaremos fortaleciendo los talentos naturalesde nuestros alumnos y estaremos acompañando positivamente al alumnado en su desarrollo infantil. Y sin duda, y a la misma vez, aumentando su deseo de aprender más y aceptar nuevos desafíos. La Escuela debería convertirse en un estilo de vida.
Si avanzamos en la dirección de nuestros sueños, encontraremos un éxito inesperado en cualquier momento. Henry David Thoreau