Todos conocemos a Wally, el vagabundo de gafas y jersey de rayas creado por Martin Handford en 1987 y que protagoniza los libros ¿Dónde está Wally?, en los que hay que encontrar al personaje en medio de un marasmo de figuras y objetos que despistan al lector, y que forman parte sin duda de la infancia (o no tanto) de varias generaciones.
Pues bien, el proyecto de llevar a Wally a la gran pantalla lleva varios años sobre la mesa de los grandes estudios de Hollywood. Ya sabemos que no sólo de fuentes literarias vive el cine, ya que en los últimos años hemos visto cómo los medios de entretenimiento infantil y juvenil, como cómics, videojuegos, juguetes y hasta juegos de mesa (¿quién iba a imaginar que se podría hacer una película sobre Hundir la flota?) han servido como inspiración para crear largometrajes con más o menos enjundia. Por eso no es de extrañar que en 2011, nada menos que la MGM adquiriera los derechos de ¿Dónde está Wally? para su potencial adaptación al cine. Desde entonces, mucho se ha rumoreado sobre qué tipo de película podría hacerse con ese material de partida, siendo la comedia de aventuras para toda la familia la salida lógica y posiblemente más rentable para dar vida al carismático personaje.
Sin embargo, poco o nada más se sabe de ese proyecto futuro, ni siquiera los nombres de los encargados de hacerlo realidad. Por eso, ¿qué mejor ejercicio que el de imaginar una película sobre Wally con un tono completamente diferente, bizarro y excesivo?
Eso precisamente es lo que ha hecho Alex Goyette, más conocido por Joule Thief, el alias que utiliza en su canal de YouTube, plataforma en la que es toda una celebrity y en la que se dedica a colgar sketches de humor y parodias. Así, Goyette imagina que Wally (o Waldo, como es conocido en el mundo anglosajón) no es un simpático y despistado trotamundos sino un ex-agente atormentado por su pasado y con infinitas capacidades para asesinar y manejar todo tipo de armas.
No faltan en este falso trailer (dirigido y protagonizado por el propio Goyette) alguno de los tópicos del thriller de acción, desde los tiroteos ralentizados a la escena de búsqueda de redención en la iglesia, pasando por una coletilla pegadiza que soltar después de cada ejecución. Y es que disfrutaríamos mucho más si esta fuera la verdadera película sobre Wally.