
¡¡Buenos días!! Como veréis estas semanas de verano, me estoy dando un poco de descanso bloggero preparando cosas nuevas para el próximo curso y diseñando temas nuevos para el blog. No te creas, no se me ha olvidado que en agosto no publiqué el calendario y tengo uno preparado.
Eso si... no se cuando verá la luz pero tiene que ver con el post de hoy.
Hoy vamos a inspirarnos en algo que yo tengo en el armario y que no uso nunca: los pareos.
Jo, como me ha costado ver como se decía en inglés y al final (creo y corrígeme si me equivoco) se llama igual.
El pareo, para mi, no deja de ser un pañuelo que te cubre y adorna para las fiestas playeras. En mi caso, y dado que yo a la playa hago de "dominguera" y voy con mi toalla a darme un baño y nada de eso de tener una piscina con barbacoa donde invitar a mis amigos y poder lucir un bonito pareo... pues no lo uso mucho. Eso si, tengo algunos y muy bonitos por cierto.
Siempre que los encuentro en el armario digo "anda, un pareo. Este año me lo pongo". Lo saco a la mesa para que no se me olvide al hacer la maleta y cuando vuelvo en septiembre... ahí sigue. Otra vez al armario y otro pensamiento de "el año que viene lo uso fijo".
A mi me encanta como quedan con un bonito bikini a juego. Nada de eso de ponértelo como un vestido atado al cuello, que si, que vale, a Cameron Díaz le queda genial pero si lo haces tú, el burruño del nudo no te sale igual.... no mientas.

Si te pones pareo, hazlo con estilo. Y si no sabes cómo, mira nuestras propuestas.


¿Como ponérselo? Yo ya he dado mi opinión y parece que soy bastante clásica... ¿a ti que te parece?

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