Where are you from?

Where are you from? ¿De dónde eres?, es una pregunta frecuente hacia los ciudadanos de este país que viajamos al extranjero. Si eres del 22% de los españoles que es capaz de responder esta pregunta y mantener una conversación, felicidades. Lo complicado, al menos para mi, es tener una respuesta honorable a eso. Porqué yo, desde hace ya un tiempo, me avergüenzo de responder España.

Porcentaje de población que es capaz de mantener una conversación en inglés en cada país de la UE.

Disculpadme que me desvie de mi tema habitual que es la economía, pero creía necesario hacer un parón para reflexionar sobre lo que está pasando y de que és realmente la marca España hoy en día. 
Millares de casos de corrupción, Caso Nóos, Bárcenas, Gürtel, Malaya, las ITV, Tarjetas opacas, etc. Presidentes de gobierno que no hablan inglés y por no pedir una lengua extranjera, tan solo son capaces de expresarse en uno de los 5 idiomas oficiales de este país (cuando no lo hacen a través de una pantalla). Mire usted, como le gustaba decir al señor Aznar, si la persona que se supone, más importante y representativa de una nación, no es capaz ni de hablar más de una lengua (ni de intentar aprenderla), si esos individuos por llamarlos de algún modo, deben gestionar nuestras vidas presentes y futuras, yo ya no quiero vivir aquí. Un nivel cultural 0, por no decirlo en números negativos, de la mayoría de jóvenes españoles (que además se ríen de esa carencia). Ciudadanos sin ambición ni objetivos, transeúntes de su propia vida, futuro negro de esta península. Una población adicta a la basura, adicción provocada a la vez por esa falta de cultura, de esa educación que tanto se necesita. Una falta total de honor y responsabilidad de los más altos responsables de este país. Después de todo esto y más, te vas al extranjero y te preguntan: ¿de dónde eres?
Atrevete a responder, valiente.

Con todo lo que está sucediendo y con lo que está por venir, ¡suerte!, yo me voy marchando.