
A principios de primavera, en plena cuarentena, ordené mis fragancias y puse a mano varias de tipo floral/frutal que tenía a medias. Pese a estar en casa, he mantenido algunas costumbres como ponerme colonia en mi rutina de día, así que he ido gastando varias que tenía a medias.
Vi esta de oferta en Druni y recordé haber probado una muestra, y que me había encajado.
Así que la pedí y hoy os hablo sobre ella.
1. Elizabeth Arden y las fragancias “de té”. ¿Sabías que esta firma americana tiene más de 80 fragancias en su historial? La primera salió en 1936 y la última, este mismo año.
Dentro de las muchas fragancias que tiene, las que se centran en el té tienen línea propia, y merecida fama. Muy conocida es la “Green Tea”, con variaciones como “Green Tea Jasmine” o “Green Tea Bamboo” y además tenemos otras inspiradas en otros tipos de té como esta que yo os cuento, con el té blanco como protagonista. Que por cierto, he visto que también tienen edición de té blanco con vainilla y eso lo tengo que probar yo.

2. White Tea, características.
Esta fragancia, que cuenta con 3 añitos de edad, tiene las siguientes notas olfativas: ↺ Salida: Mandarina, esclarea, helecho y notas marinas ↺Corazón: Té blanco, yerba mate e iris blanco ↺Fondo: Ámbar, almizcla, haba tonka y maderas exóticas. Y fijaos, me saca de mi “zona de confort” porque probablemente, de haber leído las notas sin haber probado muestra…no me habría animado con ella. Ya sabéis que suelo optar por notas más florales/frutales y menos especiadas pensando que son pesadas para verano… pero esto es un engaño en este caso, porque White Tea si es algo, es FRESCA.

Encontramos esta fragancia en versiones de 30, 50 y 100 ml. y como veis, el frasco es sencillo, bonito y elegante con predominio del color de cuya variedad es el té que le da nombre. A mi me costó 12’95 el frasco pequeño, como os decía, en Druni.
3. ¿Me gusta? Por qué Me gusta, y mucho. Porque ha supuesto un soplo de aire fresco en el tipo de fragancia que suelo usar. Sin ser radicalmente opuesta, es distinta a lo habitual en mi. Porque pese a esto, identifico su aroma como algo, “ya mío”. Es ligera, gustosa y alegre. Quizá no es de las más duraderas que he tenido, cierto, pero sí que noto en la ropa que tiene buena permanencia.
