La cantante británica no pude superar sus problemas de alcohol, tras suspender una gira en varios países de Europa por su adicción, y que durante una semana le ha provocado varios desmayos.Amy Winehouse continúa grave, a pesar de su intentos por superar dejar el trago, y que en los últimos días la mantiene pérdida en su casa en el Norte de Londres, al dársele por consumir altas cantidades de vodka.
