Tomado de Cubasi.Cu
Representantes del Wisconsin Medical Project, de Estados Unidos, entregaron suministros y equipamientos médicos al hospital universitario Manuel Ascunce Domenech, de la oriental ciudad cubana de Camagüey, informó hoy un medio local.
Integrada por médicos, enfermeros, un ingeniero químico y un estudiante, una comitiva estadounidense llegó a ese territorio cubano la víspera, acompañada de donativos para diversas unidades de salud pública, de acuerdo con un reporte del diario Adelante, en su versión digital.
En el hospital universitario Manuel Ascunce Domenech conocieron el funcionamiento de la Unidad Especializada de Tratamiento de Angiología, la nueva sala de Rehabilitación, la de Cardiología, el departamento de Anatomía Patológica, entre otros servicios, reportó. También conversaron con especialistas sobre el uso del Heberprot-P, un medicamento cubano para la cura de las úlceras en las extremidades inferiores de pacientes diabéticos, refirió.
Desarrollado en el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, este producto, registrado en una veintena de países, es de probada eficacia, pues cicatriza las heridas y evita en gran medida un número importante de amputaciones, indicó Ariel Hernández, jefe del Grupo de Angiología.
Además, tiene la novedad de aportar una solución terapéutica para esa dolencia, que hasta el momento de su manifestación no tenía opciones efectivas de tratamiento, dijo.
En tanto, el cardiólogo Ángel Miranda afirmó que en Cuba hay una red nacional muy bien estructurada para la asistencia de pacientes con padecimientos relacionados con el corazón, quienes son enviados gratuitamente a los hospitales donde mejor pueda tratarse su dolencia.
Bernard Micke, presidente del Wisconsin Medical Project, manifestó su satisfacción por el desarrollo alcanzado en el departamento de Anatomía Patológica, el cual visitó por primera vez en 1999.
También rememoró sus experiencias y obstáculos del gobierno de George W. Bush a su labor humanitaria con la nación caribeña.
Cuando Bush asumió la presidencia en Estados Unidos negó la posibilidad de este tipo de acercamientos, pero gracias a la obtención de una licencia pudimos retornar con la ayuda, por ser de carácter humanitario, y fue a partir de 2003 cuando logramos regresar a Cuba con el proyecto instituido hasta nuestros días, aseguró.
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