“Wonder Woman 1984” daba la sensación de ser una película gafada tras cinco retrasos en su fecha anunciada de estreno, inicialmente previsto para diciembre de 2019 y que, por factores ajenos a la pandemia del coronavirus, ya demoró su llegada a las salas. Después vino 2020, donde el caos sanitario mundial y el pánico al desastre en taquilla arrinconaron numerosos largometrajes llamados a ser los protagonistas cinematográficos de un año para olvidar. En 2017 se pudo ya visionar una correcta primera entrega que obtuvo destacados resultados económicos, así que las expectativas se mantenían elevadas. Era evidente que tras los ochocientos millones recaudados se imponía el rodaje de un nuevo título con el mismo personaje de comic como protagonista. Compensada en aciertos y errores, esta segunda parte combina diversas secuencias muy entretenidas con otras partes más anodinas y endebles para, al final, conformar una cinta digna, si bien alejada de las grandes muestras del género.
Con un vigoroso arranque y un intenso desenlace, su principal problema radica en una extensa sección intermedia que carece de la pujanza e inventiva necesarias para sostener un prolongado metraje de más de dos horas y media. No logra desprenderse (tal vez intencionadamente) de cierto halo de candidez desconcertante que, en ocasiones, encaja bien en la narración visual pero, en otras, evidencia falta de contundencia en su bienintencionada trama. A veces el propio largometraje parece dudar sobre la naturaleza de su género de acción, por más que durante muchos minutos resulta aceptable.
Patty Jenkins repite detrás de las cámaras. La realizadora de “Monster” (film que reportó un Oscar a Charlize Theron) ha debido firmar un pacto con Gal Gadot y con el cine de ciencia ficción y fantasía, habida cuenta que contará con la actriz en 2022 para una nueva versión de “Cleopatra” y un año más tarde se adentrará en el universo galáctico con “Star Wars: Rogue Squadron”. Sin cuestionar su capacidad para enfrentar proyectos tan complejos de una forma solvente, mi sensación es que suele quedarse a medio camino transitando por una senda de mera corrección, pero sin asumir riesgos narrativos más innovadores. La ambientación ochentera chirría ligeramente, aunque hilvana con acierto algunas escenas de acción y sabe ajustarse a las necesidades de entretenimiento de toda película de superhéroes. A la espera de que desembarque la “Viuda negra” de Scarlett Johansson en unos meses, el ranking de las heroínas queda reservado de momento para Wonder Woman.
Gadot cumple su labor interpretando a la protagonista con suficiencia. El hecho de que prácticamente sólo la hayamos visto en las sagas de “Fast & Furious” y “Wonder Woman”, impide calibrar el futuro artístico de la modelo e intérprete. Chris Pine, conocido por la serie “Star Trek” que lleva el sello de J.J. Abrams (antes de que el cineasta se sumara también a la marca de “Star Wars”), le da la réplica. Me agradó su actuación en “Comanchería” pero, por regla general, se trata de una actoral que le cuesta sumar un plus a los proyectos en los que participa. Acompaña a la pareja un largo elenco de profesionales, entre ellos Kristen Wiig (“Dónde estás, Bernadette”, “La vida secreta de Walter Mitty”), Pedro Pascal (“The Equalizer 2”, “La gran muralla”), Robin Wright (“Forrest Gump”, “La princesa prometida”) o Connie Nielsen (“Gladiator”, “Pactar con el diablo”).